El president del Govern, Francesc Antich, acordó anoche convocar para hoy a la dirección de su partido con carácter de urgencia y plantear la ruptura del pacto en todas las instituciones, es decir, en el Govern, Consell de Mallorca y Ajuntament de Palma. Fuentes socialistas consideran «muy probable» que la cúpula del PSOE sea drástica y rompa con Bloc y UM para dar paso a un gobierno en minoría con pactos puntuales del PP. La reunión convocada por Antich, con un único punto en el orden del día, comenzará a las 17.00 horas.

 Antich, que lleva dos días manteniendo conversaciones con dirigentes de su partido y también con otros socios, tiene «manos libres» de la Ejecutiva federal. Antich esperaba anoche que se concretaran dimisiones en su Govern, concretamente de Miquel Nadal, doblemente imputado en casos judiciales.

 Antich está muy molesto con el Bloc, ya que durante las últimas semanas ha paralizado de forma sistemática algunos proyectos del Govern. Los problemas judiciales de UM también están creando problemas añadidos a Antich. En estos momentos el Govern ya cuenta con dos consellers imputados por los jueces y la imagen de todo el Govern se está deteriorando día a día.

 Fuentes del PSOE señalaron a este diario que el primer objetivo de Antich era aprobar los presupuestos de 2010 en el Parlament y, más adelante, buscar una solución ante la actual crisis institucional que se vive en Balears. Sin embargo, la actual situación política se considera insostenible y Antich es partidario de adoptar medidas con urgencia. Los socialistas creen que el último trámite de los presupuestos es salvable y que podrían pactarse las enmiendas parciales con el resto de grupos. Por lo tanto, todo apunta a un gobierno en minoría y por eso Antich tiene previsto reunirse la semana próxima con el president del PP balear, José Ramón Bauzá, con el claro objetivo de buscar apoyos en el que se ha denominado como pacto de Estado.

 Reunión Antich-Bauzá

Sobre la reunión con Antich, Bauzá señaló ayer que el PP está dispuesto a dar estabilidad institucional, pero aclaró que para ello debe romperse el actual pacto. «Nosotros hemos dado un paso adelante. La responsabilidad ahora es de Antich», dijo Bauzá, que todavía no está en condiciones de aclarar hasta qué punto apoyaría el PPal PSOE si el president rompe con sus socios. No obstante, la voluntad del PP es de actuar con responsabilidad lo que resta de legislatura, según admitió Bauzá.

 

En un clima de gran confusión, en el PSOE no pueden garantizar tampoco que Bartomeu Vicens, del grupo mixto, apoye los presupuestos en el pleno previsto para el día 16 de este mes. El desmarque de Vicens en la votación de la ley de comercio supone un interrogante de cara al futuro.

 

Precisamente, Antich realizó ayer declaraciones muy contundentes que son un claro aviso para sus socios. El presidente manifestó que la situación de actual crisis política e institucional «no se puede tolerar» y señaló que «es la hora de la responsabilidad de todas las formaciones políticas, incluida de la oposición», representada por el PP.

 

Intolerable

«No voy a tolerar esta situación», advirtió el mandatario balear con ocasión de una visita que realizó ayer a Menorca.

El presidente del Ejecutivo anunció que no va a «perder el tiempo». De hecho, ya está evaluando distintas opciones para salvar la situación, por lo que adoptará decisiones «mediante el diálogo» con todos los partidos que integran el Govern de Pacte, y también con el PP: «Esta situación no se prolongará», sentenció ayer en Menorca. Aunque las elecciones anticipadas no se plantean ahora mismo, los acontecimientos podrían provocar un adelanto de las autonómicas, aunque la decisión final la tiene el president del Govern.

 

Mientras Antich busca soluciones, dirigentes de UM son partidarios de dejar el Govern antes de ser expulsados por el dirigente socialista. El asunto se planteó en la ejecutiva celebrada el lunes, pero no se alcanzó ningún acuerdo. El Bloc también sabe que tiene los días contados en el gabinete autonómico.

 

Por su parte, el conseller de Turisme, Miquel Nadal, afirmó ayer que se plantea dimitir del cargo tras su imputación en varios casos de corrupción, pero que no lo ha hecho hasta ahora porque UM le ha pedido que continúe con el convencimiento de que todo «se pueda aclarar».

 

«Mi primer impulso sería dejarlo todo; si no lo hago en este momento es porque mi partido, el presidente de mi partido, me ha pedido que de momento espere, con el convencimiento de que todo esto se pueda aclarar cuanto antes mejor».

 

UM también ha frenado la dimisión de Miquel Àngel Grimalt tras ser imputado por el 'caso Maquillaje'. Grimalt comunicó al propio Antich que quería dejar el cargo.