Los chicos de La Excepción han crecido. Gitano Antón, El Langui y Dj La Dako Style, han cumplido los 30 y ahora son padres de familia. Sin abandonar el barrio donde crecieron, Pan Bendito, en Carabanchel, estos madrileños siguen apostando por un hip hop auténtico, crítico y muy personal, que plasman en su último trabajo, La verdad más verdadera. El sábado actúan por primera vez en Eivissa en la sala Martina, en lo que será el último concierto de la gira. Gitano Antón, tras actuar en México y en Miami, habla de la trayectoria del grupo.
-Desde que nació 'La excepción que confirma la regla' en 2001, tras tres discos y todo lo que ha ocurrido desde Zapato Ortopédico. ¿Seguís siendo excepcionales?
-Nunca nos hemos considerado excepcionales. Sí que hemos sido una excepción en muchas cosas, sobre todo, en cosas que pasan a tu alrededor, en tu día a día. Por ejemplo, la música que escuchaba, el equipo de fútbol que seguías, el respeto a los demás, cómo tratamos a nuestros mayores. A día de hoy, nos seguimos sintiendo así. Quizá, algo diferentes.
-Creasteis un nuevo estilo dentro del hip hop, con temas con otro 'flow' y llenos de crítica. ¿Esta renovación del rap os llevó al éxito?
-Nosotros tenemos otra forma de hacer rap totalmente distinta. Hemos 'mamado' el mismo rap que cualquier otro chaval de calle pero a la hora de hacerlo, prácticamente, nos desarraigamos en un 90 por ciento de las influencias y de los comentarios. Aún así sonamos a hip hop pero queremos hacerlo nuestro y que suene de aquí. Hay que contar las cosas de otra manera, porque somos de otra forma y tampoco puede ser una imitación al hip hop de EE.UU. Debe ser original.
-Habéis crecido en Pan Bendito, en Carabanchel, y esto lo lleváis con mucho orgullo, ¿cómo influye en vuestra música?
-En el rap siempre se representa tu barrio, tu distrito y tu grupo. Nosotros lo llevamos muy adentro a pesar de que tenga muy mala fama. Al mismo tiempo que alardeamos de él, dentro intentamos pasar desapercibidos, porque somos los mismos de siempre y no se nos ha subido a la cabeza. Somos igual que ellos, gente sencilla. Sacamos el orgullo y también le sacamos los colores al barrio.
-Habéis interpuesto un demanda a las discográficas Warner Music y Zona Bruta por no pagar royalties y habéis autoproducido vuestro último disco y lo habéis colgado en la red de forma gratuita, ¿sois ahora más libres?
-La demanda está puesta y las primeras vistas las tenemos para 2010. Nosotros nos plantamos en un momento en el que, además, de los royalties incumplidos, estábamos en una situación agobiante. Ya no nos hacían nada de promoción y la que se hacía era a través de Arturo, nuestro manager. Luego teníamos unas cláusulas muy abusivas en los contratos y la gota que colmó el vaso fue que metieran mano en nuestro trabajo. A los artistas los enjaulan. Si ganamos el juicio, no ganaría solo La Excepción, sino que ganaríamos muchos músicos de España que están muy 'jodidos'. Ahora la libertad es total. Nos metemos en, prácticamente, todo, desde la portada del disco, hasta en el videoclip y también en el guión. Lo de que fuera gratis. Tenemos un compromiso. La cosa está difícil y nosotros no hemos perdido mucho dinero por no vender el disco. Con un 10 por ciento que se saca de cada disco no comen tres personas, ni mucho menos.
-Este es último concierto de la gira La Verdad más verdadera y el primero que dais en Eivissa, ¿que van a ver los ibicencos sobre el escenario?
-Iremos los tres y nos acompañarán en los coros la Peñita el Compás y el incombustible Rellenito Makeinjan. Presentaremos el disco y haremos un repaso de los temas del primer disco y también del segundo. Verán La Excepción más seria, más madura y más auténtica.
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