Con un recorte de presupuesto del 38 por ciento, menos coches en exposición y con una caída de ventas en el sector del automóvil del 50 por ciento en los cinco primeros meses del año arrancó ayer la primera jornada del Salón de Automoción en el Recinto Ferial, organizada por la Associació Empresarial d'Automoció i Maquinària d'Eivissa i Formentera (AEMA) y el Consell d'Eivissa.

Y frente a datos negativos no hay nada mejor que afrontar esta edición con una visión optimista, como es el caso de Laura García, asesora comercial de Audi: «Hemos puesto mucha ilusión y estamos emocionados con el salón, entre otras cosas, porque hace dos años que no se hacía. Tenemos buenas expectativas puestas en este salón».

En cuanto al precio, en este salón se puede encontrar desde el Fiat Panda por 9.300 euros hasta el Audi Q5, una de las principales novedades de este año, por 51.213 euros, o bien el BMW X1, que salió al mercado hace 20 días, por 39.782. «En nuestro caso vendemos más Pandas y 500, el primero por el precio y el segundo por moda. Además son coches pequeños y muy manejables», aseguró Julio Ribas, gerente de Autos Torres.

«Hemos venido más que nada a mirar porque no pienso cambiar de coche. Tengo un Opel Astra desde hace muchos años y me va bastante bien, aunque siempre me han gustado los BMW», afirmó Juan Costa, uno de los asistentes que acudió a esta primera jornada del salón. Albino padre e hijo, por su parte, sí que tenían intención de mirar para cambiar de coche: «Llevo un año en la isla. Hemos venido porque el coche que tengo ahora se lo va a quedar mi mujer y yo me compraré otro. Estoy entre el audi TT o el A3 coupé», explicó el hijo.

Sobre la repercusión del Plan 2000 E, algunos de los empresarios destacan su mala organización: «Sobre todo en el tema de los pagos y del presupuesto. Creo que estaba muy mal organizado», afirmó Arturo Cruz, jefe de ventas de BMW en Eivissa.

El salón del automóvil se podrá visitar hoy y mañana de diez de la mañana a diez de la noche. - - - María José Real