La revisión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para el municipio de Eivissa entró ayer oficialmente en vigor, después de que su tramitación se extendiera durante casi dos legislaturas. Fueron seis años lo que duró la redacción y aprobación definitiva del nuevo documento, que aún así todavía contará con prescripciones impuestas por Comisión balear de Medi Ambient, como la que impide el desarrollo de nuevas urbanizaciones hasta que la futura depuradora de Eivissa esté en funcionamiento.
El estreno del nuevo plan urbanístico, que viene a sustituir al anterior ordenamiento de 1987, tuvo lugar por lo tanto ayer, quince días después de su publicación en el BOIB, como lo indica la ley 20/2006 municipal y de régimen local.
En grandes cifras el planeamiento prevé reducir en casi 20.000 habitantes el techo de población fijándolo en 98.754 plazas, que el suelo rústico suponga un 44,7% del total del municipio (479 hectáreas), el urbano un 52,4%, y el urbanizable un 2,81%, (30 hectáreas).
Entre las principales zonas a desarrollar destacan sa Joveria, donde se construirá el nuevo hospital así como equipamientos y viviendas, al igual que en Ca n'Escandell, Platja d'en Bossa y es Pratet.
En lo que se refiere a zonas verdes, el PGOU sumará 484.387 metros cuadrados a los ya existentes con la creación de un gran parque urbano en Ca n'Escandell y en los alrededores del recinto ferial.
También prevé la edificación de 600 viviendas de protección oficial en Ca n'Escandell y sa Joveria, y se reservan solares para equipamientos sociosanitarios al igual que en sa Colomina. Por último, entre otros detalles, eñ nuevo planeamiento propone la construcción de un nuevo vial que conectará las avenidas Santa Eulària e Ignasi Wallis a través de es Pratet y transcurrirá junto al antiguo camino de Murtera.
Cabe recordar que la aprobación del nuevo planeamiento no contó con el apoyo del Partido Popular.
La entrada en vigor del nuevo planeamiento urbanístico permitirá iniciar los expedientes de expropiación para la zona más conflictiva de sa Penya. Eso se debe a que el Ayuntamiento ha incluido en el planeamiento una nueva unidad de actuación, denominada UA-Alt i Retir, mediante la cual podrá expropiar las 44 infraviviendas de esta zona para rehabilitarla y reformarla. La inclusión de la zona en el planeamiento urbanístico está motivada por la falta de interés o capacidad de los propietarios en recuperar sus casas, en su mayoría, ocupadas y derruidas.
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