El agua de Cala Vedella está sucia y buena parte de esa suciedad proviene de emisarios irregulares de negocios de la zona que vierten directamente las aguas fecales a la playa. Así lo aseguraron ayer varios vecinos de la playa, que explicaron que son muchos los turistas que se marchan horrorizados cuando descubren material fecal en el agua.

El alcalde de Sant Josep, Josep Marí Ribas, Agustinet, aseguró ayer que «tiene miedo» de que esto pueda estar pasando. «Creo que hay restaurantes conectados a la depuradora y otros que no lo están; esto es así y es así desde hace muchos años y por eso estamos trabajando en un proyecto para arreglar todo el saneamiento de Cala Vedella y llevarlo a la estación depuradora», explicó el primer edil, que quiere que de esta forma se conecten a la red todos los negocios o viviendas antiguas de la zona. El proyecto ya se ha entregado a Costas, que les ha solicitado que las canalizaciones pasen por debajo de una acera y no bajo la arena. «Esto lleva 30 años mal y lo estamos intentando arreglar», explicó el alcalde, que reconoció que el agua de la playa «está muy sucia» pero también porque hay muchos barcos fondeados, mucha gente bañándose y se trata de una playa «muy cerrada». «El hecho de que el mar no tenga buen color puede ser producto de muchas cosas, pero no negaré que pueda haber vertidos y por eso vamos a ejecutar el proyecto de saneamiento», explicó Marí Ribas.

El coste del proyecto para conectar los negocios y casas a la depuradora es de 150.000 euros, aunque probablemente se incrementará porque habrá que construir una acera para pasar los tubos por debajo y prolongarla de una punta a otra de la playa. La intención del Consistorio es ejecutar esta obra antes del verano que viene.

El alcalde explicó que en todo esto se encontrarán otro problema porque habrá que restringir la circulación por delante de los restaurantes y cerrar la playa de lado a lado, con todo lo que ello supone, ya que por allí pasa incluso transporte público. «Cala Vedella es un tema que nos preocupa y que nos ocupa mucho tiempo y estamos trabajando en proyectos importantes», aseguró el primer edil.

Actualmente en Cala Vedella hay varias estaciones depuradoras: una en la playa, otra que está cerca del Club Aquarium y una tercera por la zona de Cala Carbó.

Vecinos de la zona explicaron ayer que el agua contiene material fecal que provoca un hedor insoportable, sobre todo por las noches.