Los socorristas de Eivissa acordaron en su última asamblea retardar hasta el miércoles la decisión sobre el posible inicio de una huelga como medida de fuerza para reclamar un convenio que regule el sector. Así lo expuso ayer el portavoz del colectivo, Renzo Nápoli, quien matizó que otra de las actuaciones que los socorristas se plantean es poner banderas rojas en todas las playas.

Se trata de unas acciones mediante las cuales el colectivo reclamará un incremento salarial, así como mejoras en las condiciones laborales, «si no se llega a un acuerdo con la patronal».