El Ayuntamiento de Sant Antoni no podrá convertir en urbanas las zonas ya construidas de Punta Galera, Cap Negret y Cala Gració en su nuevo planeamiento urbanístico. La concejala de Urbanismo, Pepa Costa, reconoció ayer que la instrucción que les dio un magistrado del Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB) durante una reciente conferencia del Consell fue muy clara: los 500 metros de Àrea de Protección Territorial (APT) de Costas tiene que mantenerse como suelo rústico protegido y no puede haber urbanos por consolidación.

Esta advertencia se dio al Consell y a todos los ayuntamientos para que lo tuvieran en cuenta a la hora de modificar sus planeamientos ya que supone dejar fuera de ordenación zonas urbanas. En el municipio de Sant Josep hay varias zonas hoteleras que quedan en esta situación, como el final de Platja d'en Bossa y una amplia zona de Cala Tarida.

El Consell decidirá

Costa explicó que están pendientes de que el Consell 'dibuje' esta APT de costas, aunque hay alguna esperanza de que algunos trozos sí que queden como suelos urbanos porque la máxima institución insular tiene que sacar lo que se llaman proyecciones ortogonales, que permitirían algunos trozos urbanos en estas zonas. «No sabemos qué tipo de modificación hará el Consell», explicó Costa, que indicó que están a expensas del PTI para saber cómo lo enfocan.

El mayor inconveniente que ve la concejala para las personas que tengan casas en estas zonas es que no se podrán dotar con alcantarillado y asfaltado, porque aunque son ya zonas consolidadas no podrán ser calificadas como urbanas y tendrá que permanecer como suelo rústico protegido.

«Están allí, pero no se les podrán dar servicios urbanos», expresó Costa, que aseguró que el equipo redactor del planeamiento urbanístico de Sant Antoni está estudiando qué hacer.

La concejala resaltó que esto afectará a amplias zonas de viviendas que ya están construidas y que no tendrán ni servicios urbanos ni pagarán la contribución urbana.

El Consell remarcó hace pocos días la gran complejidad de marcar las proyecciones ortogonales para marcar si puede haber algún suelo urbano en estas zonas.

La concejala de Sant Antoni también se mostró preocupada porque esta nueva jurisprudencia del TSJB afecta a ses Variades, donde había un proyecto para construir más de 400 viviendas. Según Costa, será el Consell el que marque si puede haber algún trozo urbano en la zona según la proyecciones ortogonales. «Es un tema muy complejo que tienen que hacer los técnicos y se hará a través de la modificación del PTI», expresó la concejala, que confió en que quizás quede algún «trocito» urbano, aunque reconoció que ahora todo queda a expensas del Consell.