El conseller de Programació Econòmica Corporativa, Tomás Méndez, aseguró ayer durante el pleno del Consell d'Eivissa, que este lunes se liquidarán y a principios de julio se empezarán a saldar las deudas que la entidad mantiene con empresas, entidades sociales y particulares, una cifra que ronda los 7 millones de euros. Méndez hizo este anuncio en el turno de réplica a la moción presentada por el PP en relación a la necesidad de agilizar los pagos de la entidad, una propuesta que fue aprobada por unanimidad.
Según las explicaciones del conseller, la corporación insular ha abonado en lo que va de año 10,9 millones de euros en concepto de facturas de proveedores (5,3 millones), pago de inversiones a contratistas (casi 2 millones), pagos a ayuntamientos (algo más de 1 millón) y pagos de ayudas a subvenciones a entidades y particulares (2,3 millones).
«A 26 de junio, quedan pendientes de pago, y serán abonados de inmediato, unos 7 millones de euros de los que 2 corresponden a facturas, 3 a inversiones, 1 a los Ayuntamientos y unos 800.000 a asociaciones y en concepto de subvención», explicó el conseller.
Méndez también anunció que tienen la promesa del Govern de abonarles en julio 8 millones de euros, «con lo que en agosto las cuentas del Consell podrían estar equilibradas» en cuestión de pagos pendientes. «El pago de los 7 millones no está condicionado a la llegada de este dinero, el cual usaremos para cubrir nuevos gastos que salen constantemente», añadió.
El conseller, igualmente, explicó que hace una semana mantuvo un encuentro con responsables de la Conselleria d'Economia del Govern en el que reclamó, a petición de algunas entidades, que se abone a las ONG de las Pitiüses las cantidades que se les deben. «Afirmaron que, para fines de julio, estas deudas estarán liquidadas», avanzó.
Nuevo crédito
En la sesión de ayer también se aprobó la concertación de un crédito de 5,5 millones de euros, una medida que contó con la abstención del PP que apoya la consecución de fondos para pagar ayudas y generar liquidez pero que rechaza que el Consell deba endeudarse más «por una falta de previsión y una mal gestión», según defendió la consellera popular Carmen Domínguez.
El empréstito servirá para abonar inversiones pendientes a 31 de diciembre de 2008 (fundamentalmente 2,5 millones todavía impagadas en concepto de la construcción de la carretera de Sant Rafel y permitirá realizar transferencias de capital por 1,7 millones correspondientes a los Planes Insulares de Obras y Servicios de los dos últimos ejercicios, así como intervenciones del Consorci Emprenen, fundamentalmente equipamientos deportivos. La cantidad restante cubrirá subvenciones y facturas pendientes de pago.
El préstamo, que se podrá contratar antes del 25 de julio y por una duración de seis años, responde a una medida extraordinaria de endeudamiento prevista por el Gobierno.
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