Los concesionarios vendieron en mayo en las Pitiüses 278 vehículos, de los cuales una gran mayoría, 168 coches, fueron adquiridos para su explotación por empresas de alquiler. A éstos se sumaron 90 ventas a particulares y 39 vehículos comerciales. En conjunto suponen una caída de casi el 62 por ciento respecto al mismo mes del año anterior, cuando el número total fue de 729. Es decir, 451 menos.

En el apartado de acumulado del año la diferencia es ligeramente inferior (-50,53 por ciento) puesto que si éste se han realizado 886 ventas, de las cuales 434 fueron a particulares, 344 a alquileres y 17 a comerciales, el anterior ya se llevaban 1,791 (678 a particulares, 897 a alquileres y 342 a comerciales).

La Asociación Empresarial de Automoción de Eivissa y Formentera reconoció ayer que «sigue la preocupación en el sector debido a los datos negativos que se siguen reflejando». Entienden que «las medidas adoptadas en lo que va de temporada no tienen la eficacia esperada, situación agravada si cabe por las dificultades de financiación existentes». En su valoración, las ventas del último mes han sido «altamente negativas» y destacan que «lo más significativo [es] el descenso de matriculaciones a flotas de un 68,42% con un acumulado del 61,66, hechos que no se producían desde hace muchos años. «De todos modos, no queremos ser catastrofistas y siendo prodentes a la hora de hacer valoraciones de cara al segundo semestre de 2009, los indicios nos indican hacia una valoración favorable, aunque no lo suficiente a corto plazo para la recuperación del déficit acumulado», añadieron a través de una nota de prensa.