Vila se convertirá, en un plazo previsto de cinco meses, en el primer municipio de las Pitiüses cubierto en su práctica totalidad de una red de internet inalámbrica pública, según anunció ayer el concejal de Mantenimiento Urbano, Joan Rubio. El desarrollo de la red precisa para el sistema tendrá un coste de unos 113.000 euros, se beneficiará de los Fondos Estatales de Inversión Local destinados a Vila y permitirá sacar del paro a tres personas.

Eso sí, el sistema nacerá con algunas características que pueden desincentivar su uso. El primer inconveniente es que la red pública no será de balde para los ciudadanos. En los próximos meses se definirá el coste, pero Rubio aseguró que «se fijará en función del coste pero será muy barato, con precios muy sociales puesto que debemos dar facilidades de acceso a los ciudadanos a las nuevas tecnologías». El edil señaló que «la red no puede ser gratuita porque así lo marca la normativa» y explicó que el motivo es «evitar la competencia desleal a los otros operadores». «Por la ley de libre competencia, y algunas sentencias que se han producido en casos similares de municipios que querían una red local gratuita, se pondrá un precio», remarcó el concejal.

El sistema será gestionado, casi con toda seguridad, por una empresa privada que es la que tendrá que gestionar el cobro de la tarifa. El medio de pago tampoco está definido «y existe la posibilidad de que los usuarios se tengan que registrar y dar su número de cuenta o que compren tarjetas para acceder al servicio», aseguró Rubio.

Frecuencia y datos

Otro de los posibles inconvenientes para los usuarios que presenta la red planteada se refiere a que se limitará el acceso a determinadas páginas. «La red podrá usarse para conectarse a una página o enviar un correo, pero no para la descarga de vídeos y otros contenidos de gran peso porque se saturaría la línea», dijo.

Pero la limitación inicial más importante en un primer momento es la frecuencia en que se ofrecerá la cobertura total del municipio. Los cinco gigahercios (GHz) en que se emitirá sólo son recibidos por los ordenadores de última generación, explicó Rubio. La señal de 2'4 GHz que gestionan la mayoría de dispositivos (PDA, móviles, ordenadores de tipo medio) sólo se podrá recibir con el uso de una antena que convierta la frecuencia o conectándose en las zonas más turísticas de la localidad que estarán cubiertas por la veintena de emisores que se ubicarán en instalaciones municipales. Más adelante se podrán colocar routers en farolas y fachadas de las calles del municipio para ampliar el alcance de esta red secundaria, avanzó el edil.

Otro de los proyectos financiados con fondos estatales será la construcción de un vial peatonal para poder acceder al aparcamiento de es Gorg, junto a GESA. Esta actuación incluirá la colocación de un semáforo en el primer cinturón para facilitar el cruce de los usuarios.

El proyecto, que tendrá un presupuesto de ejecución de tres meses y cuyo presupuesto es de 310.000 euros, incluirá la iluminación y la creación de una vía peatonal de hasta cuatro metros de ancho. Esta actuación dará empleo a una decena de personas desempleadas.

La actuación consiste en la habilitación de un camino de unos 123 metros de largo, accesible para personas con movilidad reducida y con pavimento antideslizante, explicaron desde el Ayuntamiento. La intervención servirá para colocar alumbrado, así como la colocación de papeleras, señalización del paso de peatones y de las zonas de aparcamiento.

El de es Gorg es uno de los parkings disuasorios habilitados por el Ayuntamiento y cuenta con 400 plazas.

Joan Rubio presentó ayer otras dos propuestas que se beneficiarán del Fondo Estatal de Inversión Local y que permitirán, en conjunto, dar empleo a 21 personas. El primero de estos planes, presupuestado en 200.000 euros, consistirá en la construcción y ampliación de parques infantiles. Los nuevos se ubicarán en la calle Alzines de Platja d'en Bossa y en sa Capelleta. «Esta instalación nos hace bastante ilusión porque se situará junto a las murallas, frente a La Consolación, donde estuvo el primer parque de la Isla», afirmó el edil. Las ampliaciones de juegos se realizarán en parques de Cas Serres y el Paseo Marítimo.

La segunda intervención consistirá en el cambio de la infraestructura de iluminación del estadio de Can Misses que irá acompañada del cambio del sistema de megafonía. Todo ello tendrá un coste de 236.000 euros y un plazo de ejecución de cuatro meses.