Felisa Vidal prometió ayer «imparcialidad e independencia» tras tomar posesión como nueva magistrada de la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB), después de que el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) aprobara su elección el pasado 26 de marzo, pese a ser la segunda candidata de la terma de tres magistradas propuestas por el Parlament.

Tras jurar su cargo, Vidal aseguró que ya es momento de «olvidar» las críticas vertidas contra ella por el propio Govern, que califica de «decepcionante» que el CGPJ la eligiera a ella para este cargo, a pesar de ser la segunda candidata, a propuesta del PP, en un listado que encabezaba la candidata progresista Carmen de España. El enfado del Ejecutivo autonómico se debió al hecho de que Vidal, ex-alto cargo del Govern de Jaume Matas, donde fue jefa de los Servicios Jurídicos de la Comunidad, deberá juzgar causas que afectan a políticos populares.

«Las tareas que se me enconmienden las ejerceré estrictamente, tal como establece la Ley Orgánica, con independencia, imparcialidad y respeto a la Ley, que es como corresponde a la función del juez», zanjó, al tiempo que manifestó que cada caso se analizará, con el fin de determinar si existe algún motivo para que se inhiba de juzgarlo.

El portavoz adjunto del PP, Francesc Fiol, manifestó que el nombramiento de Vidal es una «victoria de la Justicia».