S. P./EFE

El proceso de construcción del nuevo hospital de Eivissa en los terrenos colindantes al actual Can Misses podría estar a punto de acabar su peregrinar por los despachos. Según anunció ayer en Vila el president Francesc Antich, el Consell de Govern aprobaba esa misma mañana el Decreto Ley de Medidas Urgentes para acelerar la obra «que en julio podría licitarse y la idea es que en noviembre puedan iniciarse los trabajos».

Posteriormente era el conseller de Salut, Vicenç Thomàs, el que confirmaba la noticia y apuntaba que «gran parte» del centro hospitalario, que «reutiliza» el actual y crea nuevos equipamientos, podría estar en funcionamiento a final de 2011 o principios de 2012. El módulo que abriría sus puertas antes sería el de consultas externas. El titular de Salut añadía que el coste de los trabajos y el equipamiento ascenderá a 110 millones.

La resolución del Govern no es el último paso que tendrá que superar el proyecto. El decreto tendrá que ser convalidado por el Parlament, el Ib-Salut deberá aprobar el proyecto y Vila deberá realizar un informe previo e incorporar esta modificación a la revisión del Plan General de Ordenación Urbana.

Interés general

A pesar de que todavía falten estos trámites, Antich resaltó que esta resolución de su gobierno permite «la urgente ocupación (de los terrenos) y eso dará la posibilidad de que se pueda licitar la obra a principios de julio y que se adjudiquen en octubre».

Además de promover la urgente ocupación de los terrenos, la decisión del Govern incluye la declaración de 'inversión de interés autonómico', «de esta forma la ejecución del proyecto no dependerá del desarrollo territorial previo», destacó el Govern en nota de prensa. Al tiempo, se señala que el actual Can Misses ha cumplido 24 años «y muchas de sus instalaciones están obsoletas», y que «las variaciones demográficas, las necesidades sanitarias y la exigencia de calidad de los servicios asistenciales, así como los niveles de afluencia turística, han provocado que se deban desarrollar nuevas infraestructuras». Se espera que las Pitiüses pasen de los 126.000 residentes de 2007 a 160.000 personas en 2015 y que la suma del nuevo y el viejo Can Misses pueda dar asistencia a un máximo de 180.000 personas.

Desde el Govern no se oculta que «se ha tenido en cuenta la brusca desaceleración económica» que aconseja «la urgente actuación para impulsar la obra pública».

Satisfacción

El presidente del Consell d'Eivissa, Xico Tarrés, y la alcaldesa de Vila, Lurdes Costa, acompañaban a Antich en el momento de hacer su anuncio, durante la apertura del festival Eivissa Medieval.

«Es una gran noticia. Desde el Consell sólo podemos agradecer la diligencia del Govern en solventar un tema tan importante porque todos sabemos que necesitamos tener el nuevo hospital cuanto antes», dijo Tarrés. El presidente insular se congratuló de que se disponga de radioterapia. «Afortunadamente se ha tenido la sensibilidad para entender que Eivissa, por el número de población, la cantidad de casos que hay y demás debe tener una unidad de radioterapia», afirmó.

Por su parte, Costa defendió que «cuando hemos tenido que buscar un atajo o una manera de acelerar el proceso se ha hecho, pero ha estado siempre tramitándose el proyecto y no se ha perdido ni un día», concluyó.

La consellera insular de Política Social i Sanitaria, Patricia Abascal, se felicitó por la resolución anunciada por Antich y resaltó que, una vez acabadas las obras, se conseguirá «un nuevo hospital, que cubrirá más y mejor las necesidades de los ciudadanos dentro del sistema público».

Abascal aseguró que «sin la unidad de radioterapia, así como otros servicios necesarios como neurocirugía o cirugía maxilofacial, nacería cojo». Además, defendió el planteamiento modular del nuevo hospital «lo que nos deja bastante espacio para crecer».

Al mismo tiempo, resaltó que «al contemplarse como un centro sociosanitario, descargará bastante a Cas Serres de su función asistencial».

Por último, Abascal consideró que se ha actuado con celeridad y correctamente. «No es por echarnos flores, pero en dos años se ha realizado un proceso complejo que implica a varias administraciones y se ha conseguido terreno para otras cosas y sin expropiar», declaró.