El grupo parlamentario popular en el Congreso de los Diputados ha presentado una iniciativa «para que los chiringuitos puedan continuar en la playa» y estudia «muy seriamente que, en determinados casos, la protección de la costa vaya unida a la protección de la propiedad».

Así lo aseguró ayer Carlos Floriano, portavoz del PP en la Comisión de Medio Ambiente de la cámara baja, durante una rueda de prensa que ofreció junto al también diputado nacional Enrique Fajarnés y al diputado autonómico y presidente del PP insular, Miquel Jerez.

Soriano criticó al gobierno de Zapatero «por poner la proa para terminar con el servicio de restaurante que se presta en la costa mediterránea» y aseguró que la aplicación de la Ley de Costas que hace el Ministerio de Medio Ambiente «está generando un grave problema económico y social». «Para que los chiringuitos permanezcan en la playa no hace falta modificar la Ley de Costas, hace falta hacer la misma aplicación que hicieron Felipe González y José María Aznar. Porque la ley no sólo no prohibe el servicio de restaurante si no que lo regula», apuntó Floriano.

Asimismo, el portavoz parlamentario anunció que se reuniría por la tarde con los propietarios afectados por el deslinde de Sant Joan. Por ello, en este marco, Floriano criticó también que «de buenas a primeras quieran convertir una propiedad en concesión administrativa, después de que la gente construyó con permisos cuando el estado estaba obligado a hacer deslindes y no los practicó». «Desde el punto de vista de carácter tradicional, de generación de empleo y de riqueza el gobierno ha vuelto a crear problemas en vez de solucionarlos. Por eso, le pedimos que no haga nada, que se esté quieto o que dé la cara. Porque cuando Zapatero vino a las islas dijo en campaña electoral que iba a hacer modificaciones para que los deslindes respetaran todos los derechos», destacó Floriano.

Por su parte, el diputado Enrique Fajarnés explicó que también se ha planteado a la Comisión del Medio Ambiente del PP «los problemas de delimitación de competencias en la bahía de Sant Antoni, uno de los puntos de conflicto entre Ports de Balears y Costas». Asimismo, destacó que además se reclamará a Medio Ambiente una solución para el camino de acceso a Cala Saladeta, que suele estar cortado por la valla de una vivienda particular.

Por otra parte, para Floriano derribar las casetas varadero «cuando forman parte del patrimonio cultural, medioambiental y económico es un grave error». «Por tanto el PP va a hacer lo posible para que eso no suceda», apuntó el portavoz, quien exigió que se «expropien y paguen» las propiedades que se vayan a derruir. Asimismo, aclaró que «defenderá» todo lo que se haya hecho en el marco de la ley pero que será «beligerante» con la propiedades que no la haya respetado.