La industria turística sufrió una acelerada contracción de la demanda en 2008, especialmente a partir del segundo semestre del año, lo que abre una perspectiva «incierta y desfavorable» para 2009, tanto en lo que se refiere a la llegada de turistas como en el gasto y la estancia media, con lo que la recuperación del sector se pospondrá hasta 2010.

Estas son las principales conclusiones de un estudio publicado en el boletín financiero del Santander, que valora las perspectivas de la actividad turística y que pronostica que el PIB turístico podría descender un 3% en 2009.

La recesión en los países emisores del turismo a España y el tipo de cambio del euro, fundamentalmente por un encarecimiento del 20% frente a la libra esterlina, juegan en contra de la evolución del sector de cara a 2009. Así, los turistas viajarán este año a destinos más cercanos al lugar de residencia y las reservas se retrasarán a la espera de encontrar ofertas de última hora. Ante este escenario de ralentización, el informe señala que 2009 puede ser un año oportuno para «acelerar las reformas» en el sector, «con inversiones que redefinan el modelo turístico español para convertirlo en un producto más moderno y competitivo».