Eivissa tendrá un juzgado de violencia sobre la mujer antes de que acabe 2009

El ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, anunció ayer la creación este mismo año de un juzgado de violencia sobre la mujer en la isla de Eivissa para agilizar los asuntos relativos a este ámbito.

Fernández Bermejo hizo este anuncio, en el pleno del Senado, en respuesta a una pregunta del grupo mixto relativa a las previsiones de su departamento para crear unidades judiciales en la isla de Eivissa y en concreto un juzgado de violencia sobre la mujer.

En su intervención, el senador Pedro Torres recriminó al ministro que no estuviera prevista la creación de este juzgado, ante lo que Fernández Bermejo anunció que sí se pondrá en marcha dicho juzgado para atender las necesidades de la isla.

Tras recordar que la lucha contra la violencia machista ha sido una prioridad de este Gobierno, el titular de Justicia añadió que también está previsto arreglar el problema que tienen las cinco sedes de Eivissa, que se encuentran en una situación «intolerable».

Entre las acciones que ha llevado a cabo el Gobierno en este sentido, ha citado la puesta en marcha de la Ley Integral de la Violencia Doméstica y los recursos destinados a este ámbito.

A pesar de que ha dicho que se ha hecho «una gran labor» en este tema, Fernández Bermejo ha admitido que «todavía queda mucho por hacer» para combatir este problema.

Torres destacó que el ministro, que tenía previsto realizar tres actuaciones en Balears (un Registro Civil y dos juzgados de Primera Instancia) todas ellas en Palma, haya rectificado y haya anunciado esta cuarta actuación referida a Eivissa. El Senador informó, además, de que Fernández Bermejo «está mirando crear otras unidades» en Balears a lo largo de este 2009.

El pasado seis de noviembre de 2008 fue la última fecha en la que el Ministerio de Justicia se pronunció sobre la petición del juzgado de violencia machista para Eivissa negándoselo. Aunque, desde Justicia dijeron que aún quedaba pendiente «una confirmación».

Días después, a finales de noviembre, el Consell pedía a Bermejo que reconsiderara tal decisión argumentando que 600 casos al año de violencia machista justificaban este juzgado específico.