La naviera Iscomar tuvo que suspender ayer sus conexiones entre Vila y Dénia por «desavenencias económicas» con la empresa ucraniana propietaria del 'Begoña del mar', buque alquilado que opera en esta línea, según informaron algunos marineros de la dotación de Europa del Este que opera el ferry y confirmaron desde la empresa con base en Menorca.

Esta situación dejó en tierra a un centenar de pasajeros que esperaban ayer al mediodía embarcar con destino al puerto alicantino. La paralización del barco en Eivissa impide también que pueda realizar la singladura en sentido inverso desde la rada dianense.

Una pasajera afectada declaró ayer que sólo parte del pasaje había recibido algún tipo de aviso de la cancelación del trayecto y que la mayoría de los viajeros lo supo cuando ya estaba en el puerto de Eivissa dispuesto a embarcar. «Había muchos coches y camiones esperando para embarcar y, cuando se hizo la hora de salir (las 14 horas) allí no había subido nadie al barco y no dejaban que ningún vehículo subiera la rampa», relató.

«Los marineros nos dijeron que era por algo de que no les pagaban y la compañía nos aseguraba que era un problema técnico», añadió la afectada, quién lamentó la falta de información.

Fuentes portuarias que presenciaron los hechos aseguraronn que la falta de explicaciones suficientes y las versiones contradictorias provocaron que los afectados por la cancelación se fueran alterando progresivamente, lo que creó algunas situaciones de tensión aunque, finalmente, no se registró ningún incidente.

Negociaciones

Según varios miembros de la dotación que sirve el apartado técnico y mecánico del barco (el personal de atención a los pasajeros está contratado directamente por Iscomar), en la mañana de ayer recibieron la orden desde su base en Ucrania de no operar hasta que no se recibiera el pago de una cantidad que les era adeudada por parte de Iscomar.

Por su parte, fuentes de la naviera negaron que se trate de algún tipo de deuda o impago y se refirieron a que «Iscomar está negociando con el armador ciertas desavenencias económicas que han surgido respecto a algunos puntos del acuerdo de alquiler de la embarcación». «La situación está intentando solventarse y ya hoy (por ayer) se han mantenido los primeros contactos para conseguirlo, por lo que confiamos en que se pueda llegar a una solución del problema en breve», añadieron.