La Federación de Empresas Hoteleras de Ibiza y Formentera (Fehif) reclamó ayer a los ayuntamientos que no sigan incrementando la presión fiscal sobre sus establecimientos y que estabilicen o reduzcan las tasas municipales. La entidad ha determinado que en los últimos cuatro años el Impuesto de Bienes Inmuebles ha crecido de media una subida del 41,59%, lo que implica un ascenso anual del 10,40%. A esto hay que sumar un aumento del 54,62% de la tasa de basuras, un 13,66% por ejercicio.
«En estos últimos años el incremento (de las tasas locales) ha sido espectacular. Eran años de bonanza, pero ahora entendemos que ha llegado el momento de congelar los impuestos e, incluso, si hubiera alguna posibilidad de rebajarlos sería una decisión muy bien acogida», apuntó el presidente de la patronal, Juan José Riera.
El empresario remarcó la necesidad de evitar aumentos «que repercuten en la cuenta de explotación, lo que implica un aumento de los costes y disponer de menos recursos para invertir y modernizar los establecimientos», una circunstancia que condiciona «la competitividad frente a otros destinos, especialmente en los años difíciles que se aproximan», añadió.
Mejor gestión
La congelación o reducción de las exacciones locales debería compensarse con una «mejor gestión de los recursos», priorizando inversiones y generando unos servicios públicos más eficientes. «No pedimos nada específico para los hoteles, se trata de cuestiones que primero beneficiarían a los residentes y después a los visitantes», apuntó. Riera se refería a «calles sucias, playas descuidadas o parques sin mantenimiento».
La crisis general está restando competitividad a Eivissa y ha provocado casos como el de algún touroperador que ha dejado de contratar con 20 hoteles, explicó Riera. Ante esta situación existen muchas vías para ayudar, no sólo la rebaja de los impuestos municipales. Reducir el IVA «es algo que no se plantea todavía pero podría ser bueno si baja mucho el consumo porque podría reducir precios», apuntó. «El impuesto de sociedades está en torno al 30% o 35% y ahí también hay margen para actuar», añadió.
Otras ideas que arrojó el hotelero fueron la de recortar los plazos de amortización de las inversiones y, especialmente, realizar promoción específica de Eivissa en los mercados tradicionales y otros poco explotados para favorecer el alargamiento de la temporada.
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