Catalina Soler ha comunicado a la dirección del PP balear que no quiere seguir como portavoz. Soler mostró ayer malestar por un comentario publicado en Diari de Balears donde se informaba que en el PP se cuestionaba su labor como portavoz a propósito de la sentencia contra Lluc Tomàs, ex alcalde de Llucmajor. Diari de Balears apuntaba que Soler había cometido varios errores en la rueda de prensa, alguno de ellos por confusiones sobre el procedimiento judicial que afectaba a Tomàs tras la sentencia condenatoria.

Catalina Soler afirmó que la sentencia era recurrible ante el Tribunal Superior de Justicia, una información que facilitó un jurista del PP a la portavoz de los populares. Cuando se intentó rectificar, Soler se encontraba en plena rueda de prensa. En el comentario se citaban fuentes del PP. Soler, que reconoció estar muy afectada en una reunión mantenida con varios periodistas, mostró su sorpresa por las críticas que ha recibido en las últimas horas y acusó al entorno de la presidenta del PP balear, Rosa Estaràs, de filtrar esas informaciones que dañan su imagen. No obstante, Soler dejó claro que confía en Estaràs y que no tiene ningún reproche contra ella.

«Me voy y no hay vuelta atrás. Lo mejor es que no sea portavoz», comentó Soler. La portavoz del PP ofreció una rueda de prensa en la sede del partido sin tener constancia de que Tomàs dimitiría unas horas más tarde. Por lo tanto, las declaraciones Soler perdían cualquier interés informativo y, además, evidenciaban una falta de coordinación en la política informativa del PP.