El descenso en la actividad turística por lógica también se está notando en la llegada y la salida de pasajeros del aeropuerto de Eivissa. En los primeros nueves meses del año la terminal ha perdido casi cien mil pasajeros (94.844) con respecto al año pasado, un descenso del 2,2 por ciento.
La caída más espectacular se produjo en el pasado mes de septiembre en el que por la terminal transitaron 77.000 pasajeros menos que el año pasado, un dato que mantiene una relación directa con el descenso de ocupación, que se cifró en torno al siete por ciento.
El resto de meses las alteraciones más importantes se producen en marzo y abril, pero es a consecuencia de la Semana Santa, que no siempre es el mismo mes.
Los datos más significativos que corresponden a la temporada alta se observan descensos en junio (-1,5%) y juio (-4,3%) y un ligero incremento en agosto, lo que sumado al mes de septiembre, certifica el bajón de este año. Descenso que desde Aena no saben si se mantendrá en los próximos meses, «debido a que es un año difícil y con muchos vaivenes de compañías aéreas», según señaló un portavoz.
Por otra parte, cabe destacar que el aeropuerto de Eivissa tuvo el año pasado un gran incremento de pasajeros con respecto a 2006, en parte por el aumento de las compañíoas de low cost. Este hecho ha permitido en los últimos años a la terminal ibicenca volver a los datos de principios de década en los que se alcanzaban los cuatro millones y medio y que se vieron truncados por la crisis de los atentados del 11-M en 2001.
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