Ayer se abría el plazo para presentar candidaturas a la presidencia del Partido Popular de la isla de Eivissa y ya se formalizó la primera lista que concurrirá a las votaciones que tendrán lugar el 8 de noviembre durante el congreso insular.

Pere Palau presentó 61 avales (el mínimo eran medio centenar) para optar a ser el máximo dirigente del PP insular, una decisión que aseguró que tomó «por obligación moral con el partido» y al no haber existido otro candidato que aunara el apoyo de la mayoría. «Si hubiera habido un candidato de consenso, no me habría presentado; me habría puesto a trabajar para él por que esto no es un caramelo, es una cuestión que supone bastante trabajo», explicó el ex presidente del Consell d'Eivissa.

Palau dijo no preferir hablar de personas o agrupaciones locales que le presten su apoyo o vayan a ir integradas en su lista, «para no coartar el derecho que tiene cada militante de presentarse si cree que es lo mejor para el partido».

Eso sí, el líder del grupo popular en la institución insular aseguró que había hablado con «gente» de todas las agrupaciones «y cuento con apoyos en todas». «Si dijera que mi candidatura es unánime, mentiría; pero si no dijera que los apoyos son muchos, también lo haría», dejó caer el aspirante. «No sería ninguna sorpresa que se presentara otra lista porque, en el PP de Balears, no han habido casi congresos en que no se haya presentado más de una lista, tal y como ocurre en otros partidos», añadió.

Palau afirmó que su intención es consensuar la lista con todas las formaciones locales, «para que no sean sólo mías, sino del partido», y avanzó que su intención es «crear vías para que los afiliados tengan mayor participación» al tiempo que quiere «reducir la dependencia de Mallorca, no sólo en la capacidad de decisión, sino también en la financiación, para poder estar más cerca de los afiliados y los ciudadanos».