Bañista joven, que viene de fiesta y aún está ebrio, y que por su estado corre riesgos. Éste es el perfil del usuario de playas considerado conflictivo por Cruz Roja y por las empresas de socorristas que trabajan en la isla.

Las playas que más registran incidencias por el comportamiento de esta clase de usuario son Platja d'en Bossa, ses Salines, Es Cavallet y Cala Jondal. Y lo peor es que, en la mayoría de los casos, este tipo de usuario llega a enfrentarse al socorrista cuando es avisado que se está exponiendo a un peligro por su manera de actuar. Así lo asegura Borja Justo Mendieta, coordinador de la empresa de socorristas Gestión de Seguridad y Salvamento-Mar Save, que opera en Sant Josep. «En la mayoría de los casos tienen reacciones bastante agresivas con los socorristas; sobre todo, si se les hace un aviso preventivo porque están saltando de cabeza a las rocas».

Este tipo de bañista también se repite en la playa s'Arenal de Sant Antoni. Aquí, al igual que en Santa Eulària y Sant Joan, opera Cruz Roja y su coordinador, Salvador Morillo, coincide en señalar a este perfil de usuario como el más conflictivo. «Son jóvenes y vienen con otro concepto de sol y playa. Hay que tener cuidado, sobre todo, para que no se tiren de cabeza del espigón o en áreas de poca profundidad», apuntó.

Sin embargo, como en todo, siempre hay un lugar para la anécdota. Y lo que viene a continuación le ocurrió a Justo Mendieta hace sólo una semana: «Vino un chico extranjero, que seguramente no sólo estaba ebrio por las pupilas que tenía, me dijo que su amigo estaba en una boya, agarrado y que no volvía. Cogimos la embarcación y cuando llegamos nos encontramos con que estaba dormido abrazado a una boya y con cinco metros de profundidad debajo de sus pies. Tuvimos que despertarle para poder hacer el rescate». Según el socorrista, si bien algunos usuarios se ponen agresivos ante las advertencias, suelen ser los que más colaboran en los rescates. «En vez de entrar en pánico, que es lo que haría una persona en condiciones normales, se relajan tanto que se dejan remolcar».

Saltos mortales

En las playas del municipio de Eivissa, los mayores riesgos son los saltos mortales en el agua y los baños en sa Punta, donde por el oleaje los bañistas no pueden volver a subir a las rocas. Son las conductas que demandan la mayor cantidad de rescates y advertencias de la empresa Sport&Salvamento. Según su coordinador, Eric Caballeira, «sa Punta es una zona donde el agua tiene bastante oleaje y los bañistas son incapaces de volver a subir a las rocas». Y, aunque estas acciones no están relacionadas con el perfil de bañista conflictivo, a estas playas no les ha faltado, según Caballeira, evacuaciones por jóvenes que han consumido drogas.

La pérdida de niños por parte de los padres, o el intento de salvar a un pariente o amigo que está en peligro son otros de los riesgos más comunes. El primero no suele ser difícil de solventar aunque, según Justo Mendieta, «parezca que los socorristas somos una guardería». Sí que es más complicado el intento de sacar a una persona que está en peligro sin ser socorrista porque el rescate, para el servicio de emergencia, se convierte en múltiple y se vuelve más complicado.