BÀRBARA MUNAR

La oficina de la Dona del Consell suele tener menos trabajo en verano porque en Eivissa es temporada alta y las parejas pasan menos tiempo juntas. Sin embargo, hasta el pasado 31 de julio, la Oficina ha registrado un total de 168 casos por maltrato, diez más que el año pasado.

Según la jefa de la Oficina de la Dona, Olga Guerra, este verano y desde marzo ha habido una «demanda constante» de los servicios, mientras que los otros años, los meses de julio y agosto eran más tranquilos. Según Guerra, las causas todavía no se pueden aventurar con mucha fiabilidad, pero «hay un tema de crisis que siempre afecta a los servicios sociales». En este sentido Guerra destacó que cuando «económicamente la situación está peor, los conflictos familiares y entre ellos, los maltratos, encuentran un caldo de cultivo» muy propicio para que se incrementen. La oficina de Eivissa, al ser un sitio turístico, generalmente, tiene más trabajo los meses de septiembre, octubre y noviembre, cuando ha finalizado la temporada.

Una sociedad machista

La directora de la Oficina de la Dona explicó que el maltrato casi nunca aparece al principio de la relación, sino cuando la pareja está más consolidada, aunque existen excepciones en las que la violencia aparece más pronto. En este sentido, afirmó que el principal factor que empuja a los hombres al maltrato es una mala educación. «El hecho de que vivamos en una sociedad machista, unido a una mala percepción de la relación de pareja y la educación» son algunos de los factores que pueden favorecer la aparición de violencia doméstica. Si además de ello, existe alguna adicción a estupefacientes o la economía no va bien, se suman otros factores que pueden ayudar a que se den estos casos.

La mayoría de mujeres que denuncian en la oficina son españolas que tienen entre 31 y 40 años (37'8%), seguidas muy de cerca de las de 18 a 30 (31'8%). El tiempo que tardan en realizar la primera denuncia de las agresiones es entre un año y cinco.

Pese a que no hay datos registrados, la jefa de la Oficina de la Dona afirmó que cada vez las mujeres son más conscientes de que el maltrato psicológico se puede denunciar. En este sentido afirmó, que ahora «están más concienciadas, saben que también forma parte del maltrato y lo denuncian».

La entidad ofrece diferentes servicios: asesora jurídicamente a las maltratadas, les aconseja sobre las decisiones que deberían tomar una vez que han puesto la denuncia, en caso de necesitarlo les ofrece un tratamiento psicológico y también un programa de alojamiento en hogares de acogida, en los que el año pasado el tiempo medio de estancia fue de unos veinte días.