a primera de las dos grandes noches de las fiestas de Santa Maria en Formentera tuvieron como espectáculo estelar la actuación de Malèfica del Coll, colla de demonios de Gràcia (Barcelona) que ofrecieron un maravilloso espectáculo pirotécnico en el Jardí de ses Eres. Las actuaciones musicales comenzaron con Titani, grupo de folk duro formado por miembros de La Coixinera de Mataró y l'Escandall del País Valencià. Titani ofreció música de denuncia como en el tema La masovera en contra de la especulación inmobiliaria, no se olvidó de los bares Un altre cervesa si us plau pero se marcó ya finalizando su concierto un espectacular Ay Carmela, canción republicana por antonomasia para dar a continuación pasó a los demonio.
Y entonces comenzaron los tambores de la Malèfica del Coll, un sonido envolvente que desplazó el punto de atención de la plaza de Sant Francesc a un espacio más abierto como el Jardí de ses Eres donde los demonios soltaron todo su fuego interior. La colla ofreció un espectáculo vistoso, oloroso y atronador que casi hizo de día a la noche, no sólo por los fuegos que manejaban los diablos, sino también por los flashes de los asistentes. Tras casi una hora de fuego, los tambores volvieron a la plaza para el final de fiesta y a continuación subió al escenario el conjunto Rauxa. Este grupo sabadellense, practica una fusión particular entre la rumba catalana y los ritmos autóctonos del mediterráneo. Entre sus canciones más conocidas estaban Qui gemega ja ha rebut o L'alegria es el meu escut y entretuvieron al personal con ritmos bailongos hasta que les llegó el turno a los de la casa, a los formenterenses 4 de copes, que hicieron lo suyo, mezclar composiciones propia con versiones que pasaban de U2 a Bob Dylan, Hendrix o The Doors.
Anoche las actuaciones previstas eran las de Cesk Freixas, cantautor catalán, S'Albaida, grupo de folk menorquín, y Mesclat, grupo de rock folk.
En el transcurso de los actos nocturnos de ayer estaba la lectura del pregón elaborado por la comisión de fiestas, un discurso que siempre ha tenido un claro matiz político. El contenido hacia mención al hecho de que Formentera era y es la cuarta isla de las Balears sin que se le reconiceran derechos semejantes a las restantes islas, y que por ello «liquidamos las legañas y decidimos cambiar, jubilamos yugo y flechas y el dominio estatal». Pero según señaló el pregón todo no es perfecto ya que aún hay caminos «en los que verter asfalto y no queremos que nos los asfalten, hay que poder pasear, con bicicleta o a pie, o a caballo de un animal y al hablar de las bestias, siempre nos vienen a la cabeza las elecciones generales, no las ganaron quienes más miedo daban pero habrá que abrir las orejas para sacarlos fuera del sembrado».
La comisión de fiestas de Santa Maria aprueba la gestión del Parc Natural de ses Salines, reclama la gestión del puerto de la Savina, se muestra en contra su ampliación y recuerda que ni los socialistas ni el PP han de marcar los deslindes de Costas, entre otras reclamaciones.
Guillermo Romaní
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