La asociación de taxistas titulares del municipio de Eivissa expulsó ayer a los socios que siguen trabajando con los asalariados que han aceptado las licencias estacionales otorgadas por el Consell.
En total son 20 los taxistas echados de la asociación, durante una asamblea a la que asistieron 65 titulares y de los cuáles 43 votaron a favor de las expulsiones. Según explicó el presidente de la asociación, José Serafín, los titulares que ya no forman parte de la agrupación «se aprovecharon de las licencias que otros titulares rechazaron». Un rechazo que había sido pactado por la agrupación con el fin de boicotear el plan de licencias debido a que no están de acuerdo en que los permisos hayan sido repartidas al 50% entre asalariados y titulares de licencias.
«Les hemos dicho que sería expulsados sino rectificaban y al no hacerlo, los expulsamos», apuntó el presidente de la patronal.
En cuanto a los taxistas echados de la agrupación, cabe destacar que cinco pertenecen al turno de licencias estacionales de julio y los otros 15 al turno de agosto.
Por otra parte, hubo un detalle en la asamblea que fue para un titular que levantó la mano para votar su propia expulsión.
Cabe recordar que la asociación de asalariados del taxi había denunciado esta medida y que calificada por su presidente, Secundino Fernández, como «inquisidora y caciquil» y de la que no quieren ser «responsables indirectos».
El conflicto del taxi se ha cobrado ya cuatro despidos a asalariados de Vila, de los cuáles tres han sido consensuados y uno está en los tribunales.
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