El PP critica que Sant Josep coloque «residuos peligrosos» en zonas urbanas

El concejal Vicent Torres recordó que uno de los solares está situado en Can Guerxo, un suelo urbano de zona residencial «justo detrás de instalaciones deportivas, una guardería y dos escuelas». «Es mal lugar», remarcó Torres, que considera que el sitio ideal sería una zona industrial porque un punto verde de estas características genera tráfico de camiones, posibles accidentes y fugas de residuos peligrosos, incluso a un torrente cercano. Tampoco les parece bien el otro terreno escogido, que está en una zona también residencial de Cala de Bou.

El regidor criticó además que el Ayuntamiento de Sant Josep haya actuado «de espaldas a los vecinos» porque además les convocó de forma «urgente» a una comisión informativa cuando la petición de cesión de estos solares existía desde febrero. «No entendemos la urgencia».

Torres indicó que el PP tenía planes para que este solar se convirtiera en zona verde y lamentó que ahora se pueda convertir en un «nido de ratas». La portavoz de la oposición, Encarna Castro, explicó que tampoco han encontrado informes medioambientales ni referencias a la ley sobre actividades insalubres, nocivas y peligrosas en el expediente. «Les tenemos que dar a ciegas dos solares al Consell sin saber lo que se va hacer allí», criticó Castro, que lamentó que tampoco se les haya dicho si se va a impermeabilizar el suelo o qué residuos irán a parar allí. En principio el Consell pidió dos solares para recibir «producción doméstica de residuos peligrosos, además de voluminosos o fracciones de recogida selectiva como papel, envases y vidrio». La regidora también criticó que cuando Agustinet estaba en la oposición arremetiera contra chatarrería que planeaba una empresa en la zona de Cas Costes y sin embargo ahora apueste por los puntos verdes.

El PP lamentó asimismo que se apruebe en el pleno una modificación de crédito de 80.000 euros para Can Jeroni cuando todavía «nadie conoce» el proyecto que se ejecutará allí.

Los populares votarán hoy en contra del nuevo reglamento de normalización lingüística. Castro defendió que siempre han sido muy respetuosos con la ley de normalización lingüística, pero esta normativa es demasiado «radical» porque obliga a las asociaciones a una inmersión total, incluso a la hora de programar espectáculos, porque estos tendrán que ser en catalán. «El 60% del municipio está formado por castellanohablantes», recordó Castro, que indicó que el equipo de gobierno es «autoritario y dictatorial» en esta cuestión.