En una situación tan complicada como la actual, incluso las dudas se convierten en buenas noticias. La visión de la Confederación de Asociaciones Empresariales de Balears (CAEB) respecto al futuro de las Pitiüses no ofrece un mensaje optimista pero deja abierta la puerta a la esperanza de que la evolución del turismo pueda permitir capear el temporal sin daños excesivamente graves aunque los indicadores apuntan a que la construcción seguirá cayendo, el paro aumentará y sólo la evolución de los servicios marcará diferencias.
Turismo pasará al Consell en 2011 por un pacto de Administraciones
Bufí pidió «colaboración y reflexión de instituciones, empresarios y trabajadores» para salir de la crisis y apuntó que dentro del escaso margen que tienen las Administraciones, se pueden articular medidas para paliar la crisis. Respecto a la posibilidad de acceder a las competencias en turismo para reforzar al sector, Bufí cree que podría ser útil «pero desde el Consell nos han dicho que han pactado que no se hará hasta final de legislatura, por lo que no creo que llegue hasta 2011».
«Si se mantiene cierta estabilidad en la actividad turística este año se podría registrar un incremento en la actividad económica de la isla. Lo que está claro es que es bastante difícil que el crecimiento de la economía supere el 1%. A finales de año estaremos por debajo de esa cifra; dependiendo de la actividad de los servicios nos moveremos en unas décimas de aumento o unas décimas de crecimiento negativo», apuntó el director del Departamento de Economía de la CAEB, Vicenç Tur, en la presentación de su Informe de Coyuntura del primer semestre de 2008 referente a Eivissa y Formentera.
«El próximo año será una incógnita aunque es posible que nos movamos en las mismas cifras que este», añadió el economista, quien apuntó que en la primera mitad del año « se ha pasado de incrementos de cerca del 3% al 0'2%. «Esto es debido, básicamente, al paro en la construcción, el cual ha presentado una tasa de crecimiento negativo del 0'8% mientras que el aumento del 0,'3% del sector servicios sólo ha podido compensar esta caída parcialmente».
Falta de crédito
El petróleo también ha tenido bastante que ver con los problemas de la economía de las Islas, «aunque otros elementos también tienen efectos importantes como es el caso de la crisis crediticia, la cual ha reducido drásticamente la disponibilidad de financiación y ha acelerado el paro de la construcción». El vicepresidente de la CAEB y máximo representante de la entidad en Eivissa, Joan Bufí, remarcó la relevancia de este factor. «La economía se está estancando porque es imposible conseguir créditos. La consecuencia es que es muy difícil ampliar la actividad, montar una empresa o hacerse autónomo, que son vías para salir de la crisis», consideró.
La dependencia del turismo en una economía de monocultivo como la pitiusa se hace ahora más patente y los buenos o malos resultados de la temporada harán más duro o más suave el próximo invierno. «La evolución del sector turístico marcará la situación. En Eivissa y Formentera lo que marca la diferencia con Mallorca es el mercado británico. Este segmento está registrando bastantes problemas, en parte por la evolución muy negativa en los tipos de cambio de la libra respecto al euro, lo que hace que en lo que va de año han perdido un 20% de poder adquisitivo», aseguró Tur. «También el turismo alemán ha presentado una evolución negativa cuando en Mallorca no es así y está salvando, en cierta forma, la temporada. La nota discordante son los cruceristas, lo que confirma que es un sector que tiene unas perspectivas de crecimiento importantes», añadió.
Respecto a esta diferencia entre las Islas, Bufí afirmó: «Estamos discriminados en transporte y siempre que el hub (aeropuerto de conexión) principal sea Palma, aquí lo tendremos más negro, a no ser que hagan una carretera a Valencia».
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