El presidente del Consell, Xico Tarrés, explicó ayer que no tendrá ningún problema en ir a declarar como imputado si el juez le llama por el caso Eivissa Centre, en el que se investigan presuntas comisiones de la empresa Brues. «Nunca he pensado mal de un imputado hasta que un juez no se ha pronunciado y lo que tenemos que hacer es facilitar toda la información a la justicia», expresó Tarrés, que añadió que «desafortunadamente» hay muchos políticos que han sido imputados y no por ello tienen que dimitir. «Cuando el juez diga que se han hecho las cosas mal seré el primero en irme a mi casa, pero no lo haré si tengo que declarar», explicó.

El fiscal pidió la imputación de Tarrés por ser el presidente de la empresa mixta Itusa, encargada de ejecutar el proyecto Eivissa Centre. Sin embargo el juez indica que esta declaración «quedará para más adelante» porque, en todo caso, tendrá que ser la sala de lo Penal del TSJB la que lo haga, al ser aforado por su condición de diputado.

El magistrado, sin embargo, sí que imputa al concejal del PP Jaime Díaz de Entresotos, que consideró que es «lógico» que el juez llame a todos los miembros del consejo de administración de Itusa, del que él formaba parte. Pese a ello, considera que «poco tiene que aportar» en esta causa judicial, porque en las reuniones de Itusa «nunca» oyó hablar ni de comisiones, ni de cosas turbias. «Temas raros los había, pero los oía fuera del consejo de administración, como cuando vimos que se estaba construyendo el edificio sin licencia... Entonces me tiré las manos a la cabeza y fui yo quien paró todo este tema», reconoció Díaz de Entresotos, que añadió que en el consejo de administración sólo se hablaba de «cosas técnicas». «Iré a declarar encantado y me pongo a disposición de la Justicia», añadió el regidor.

Tarrés agregó que Díaz de Entresotos «estaba en el consejo de administración y sabe de lo que se hablaba allí».

El magistrado también ha rechazado la personación del PP en el caso Eivissa Centre por considerar que el imputado Antonio Pinal (presidente de Brues) llegó a un acuerdo con el PP para entregarle 600 millones de pesetas para reformar la Comandancia Militar, además de pactar una comisión de 250 millones de pesetas para el partido. «No deja de sorprender que el edificio [de Joan XXIII], casi construido, al menos la estructura y las paredes, no fuera objeto de paralización en su momento por el Consell a sabiendas de que no estaba aprobado el proyecto de modificación; de todo ello se deduce la posibildad de que algún responsable del PP pueda ser oído también como imputado, a medida que avance la causa, o de que el PP pueda resultar responsable civil», dice el auto judicial.

El magistrado también abre una pieza separada para analizar si Roque López calumnió al ahora ya ex secretario de Organización del PSOE, José Blanco. Pese a ello, considera que no es el momento de oír como imputado a López porque primero se tendría que llamar a declarar a Emilio Pérez Echagüe, Xico Tarrés y Pedro Campillo para dirimir si realmente López les calumnió o dijo la verdad sobre ellos.

Díaz de Entresotos atribuyó la falta de imputación de Tarrés al hecho de que es aforado y tendría que declarar en el TSJB, con lo que habría que trasladar toda la causa a este órgano superior. «Él es el que se iba a comer y a cenar todos los días con Pinal [presidente de Brues], él es el que era amigo suyo e iba en su avión», añadió Díaz.

En su último auto el juez también se refiere a las nuevas grabaciones de López. «No se indica ni la fecha, ni el lugar donde se hicieron», dice el magistrado, que se pregunta por qué se han silenciado hasta ahora estas conversaciones, que no considera trascendentes, aunque hay una charla entre López y Antonio Roldán interesante.