BÀRBARA MUNAR

Los establecimientos pitiusos empezarán mañana los descuentos de verano con la esperanza de salvar una primavera marcada por una caída en las ventas.

Según el presidente de la Pequeña y Mediana Empresa de Eivissa y Formentera, José Javier Marí Noguera, hasta mayo la temporada había ido bastante bien, pero desde ese mes hasta julio «las ventas han sido flojas», por este motivo asegura que «sobre todo en moda, los descuentos serán más fuertes que otros años». En este sentido habla el propietario de Tintoretto, Javier Gimeno, quien asegura que las pérdidas este año han llegado hasta un 60 o incluso un 70 por ciento respecto al año pasado.

Los propietarios, en líneas generales, se muestran bastante optimistas con la campaña de rebajas de verano. Este es el caso de Catalina Boned, propietaria de Mima's en Vila, quien mantiene que las ventas «se animarán bastante porque nunca se habían hecho tan tarde». De la misma opinión es la propietaria de El Coral, Antonia Planells, quien destaca que «mucha gente está esperando los descuentos para comprar».

Todos los comercios coinciden en que este año hay más stock que otras temporadas, este hecho unido a la llegada de los pedidos de invierno obliga a los comerciantes a deshacerse de todo el material lo antes posible. Por este motivo se prevén descuentos de hasta un 50 e incluso un 60 por ciento en algunas tiendas. Antonia Planells no es partidaria de las rebajas superiores al 50 % porque «nos tiraríamos piedras sobre nuestro propio tejado». «Venderíamos mucho los dos primeros días, pero después nos quedaríamos con material difícil de vender». De esta misma opinión es la propietaria de Gatzara, Encarna Planells, quien afirma que las reducciones serán más altas que otros años pero que «vender con descuentos superiores al 50 por ciento implica perder en las ventas».

En general, los comerciantes prevén que la campaña de rebajas «aligerará» los stocks y hará que los empresarios estén un poco más tranquilos que a principio de temporada, sin embargo certifican que no ayudará a paliar todas las pérdidas de la temporada. Algunos propietarios afirman que los comerciantes deberían «aprender de esta experiencia y aprovechar en las próximas temporadas para no cargar de stock e ir comprando a medida que se venda material».

Antonia Planells, de deportes El Coral, explica que quizás «fuimos un poco optimistas a la hora de hacer las compras de la temporada. Para el próximo invierno deberemos organizarnos y comprar mucho menos».