El mercadillo de Punta Arabí celebró ayer su 35 cumpleaños con talleres, música, pasacalles y una gran fiesta 'flower power'

media tarde, mientras los primeros visitantes comenzaban a cercarse al Hippy Market de Punta Arabí, los artesanos terminaban de colocar sus puestos para la fiesta de celebración del 35 cumpleaños del mercado. Se trataba de un día excepcional por dos motivos: por un lado, porque era domingo (normalmente se hace los miércoles) y, por otro, porque era la primera vez que se festejaba el aniversario con una fiesta flower power llena de sorpresas.

Al mismo tiempo que numerosos niños se quedaban con la boca abierta viendo el teatrillo de títeres, los mayores se refrescaban con una cerveza en La Chumbera escuchando la música de Dj Alok. La fiesta era para todos los públicos. Desde niños hasta ancianos, hippies, burgueses o simplemente turistas se acercaron para ver que ofrecía esta nueva cita con la diversión. Carmen y Fidel de la provincia de Barcelona estuvieron a primera hora, «nos quedaremos mucho más rato, a ver cómo va la fiesta. De momento nos está gustando mucho», afirmaron. También y como cada día de mercadillo hubo talleres, como el de cerámica que imparte la artesana Mar Alonso o el de malabares dirigido por María, al que se acercaron varios niños para practicar sus habilidades con las cariocas y los diábolos.

A la hora de la puesta de sol el público había crecido tanto que llenaba las calles de los puestos. Algunos se acercaban curiosos guiados por la música a la zona de los conciertos y otros se entretenían viendo la variedad de artículos de artesanía. Uno de los momentos más divertidos ocurrió durante el concierto de Yoggi y fue protagonizado por Zazou, una pequeña cantante que no dudó en quitarle el micrófono a su padre, Antonin, para hacer su particular interpretación. No sólo consiguió arrancar carcajadas sino que se llevó uno de los aplausos más calurosos.

Risas, música y diversión fueron los ingredientes que sirvieron de aperitivo a la fiesta flower power.

Natalia Salazar

A