La próxima modificación del Plan Territorial Insular (PTI) incluirá la prohibición total de edificar en las áreas definidas por la Unión Europea como Lugares de Importancia Comunitaria (LIC) o Zona de Especial Protección para Aves (ZEPA) por su valor ecológico.

«Lo más razonable, a la hora de redactar el PTI, sería incluir las LIC y ZEPA como áreas no edificables. Si incluimos como ahora que se pueden realizar edificaciones en unas condiciones muy específicas pero en la práctica no es posible la construcción, estamos engañando a los ciudadanos», explicó ayer el conseller de Política Territorial, Miquel Ramón.

Las áreas delimitadas dentro de estas figuras incluyen algo más de la mitad de superficie de las Àreas Naturales de Especial Interés (ANEI) existentes en Eivissa. En concreto, son LIC o ZEPA la zona costera de es Amunts, casi la totalidad del Parque de Cala d'Hort, una parte significativa de Serra Grossa y el parque de ses Salines, según la relación realizada por Ramón.

«En estos lugares existen las denominadas Zona Uno, que suponen cercad del 50% del total, en las que no hay dudas sobre la prohibición de construir», explicó el conseller. «El resto también están dentro de las categorías LIC y ZEPA pero no está claro si se puede edificar con lo que la gente encarga proyectos, informes de impacto ambiental y nadie les dice, muchas veces por desconocimiento, que sus propuestas no se pueden realizar», añadió.

Hasta ahora, apuntó Ramón, la Comisión Balear de Medi Ambient debía informar respecto a los proyectos urbanizadores en estos puntos, «y en el cien por cien de los casos lo ha hecho en sentido negativo».

En este momento quedan 13 proyectos por informar, si bien la comisión «se los quiere quitar de enmedio y ha dicho que se niega a informar».

«Nosotros pensamos que sí se debe informar para que, en el momento en que se levante la moratoria, se apruebe el PTI y se puedan hacer los trámites necesarios en caso de que se pueda construir».

Por otro lado, respecto a las obras en Benirràs, Ramón dijo que un técnico del Consell había revisado la zona pero que no se le había comunicado que hubiera descubierto ninguna actividad no autorizada. También dijo no tener noticias de que el Ayuntamiento haya presentado ningún documento para avalar la continuación de los trabajos.

Miquel Ramón apuntó que muy posiblemente el proyecto de Normas Subsidiarias de Sant Joan sea estudiado el mes que viene por la Comisión de Medi Ambient.

Respecto a esta planificación urbanística, el conseller mostró su esperanza de que la comisión «defina qué se puede hacer en las zonas que las Normas definen como núcleos rurales y que están dentro de las LIC y ZEPA».

«Pediríamos a la Comisión que deje claro qué es lo que puede permitirse y lo que no dentro de las Normas Subsidiarias y que no se tenga que enviar uno por uno los proyectos, con lo que los ciudadanos tendrían claro desde un principio a qué atenerse», aseguró.

De la redacción final de las Normas Subsidiarias de Sant Joan dependerá finalmente el futuro de proyectos como la urbanización Na Xamena, «realizada dentro de un planteamiento urbanístico obsoleto», o Isla Blanca, «hecho al margen de cualquier tipo de ordenación», aseguró Ramón.