Ayer por la mañana tuvo lugar la primera reunión entre los sindicatos UGT y CCOO con las patronales del sector de hostelería con motivo de la apertura de las negociaciones para la redacción del nuevo convenio colectivo. Después de que UGT anunciara que reclamaría un aumento salarial del 7 por ciento para el primer año de vigencia del convenio (el segundo se propuso un alza equivalente a la inflación más el 2 por ciento), CCOO desveló ayer sus pretensiones de cara a este acuerdo marco y lo hizo reclamando una subida salarial del 6 por ciento para el primer ejercicio de y el Índice de Precios al Consumo (IPC) más un 1 por ciento para el segundo.
Estas reclamaciones fueron consideradas ayer por el presidente de la Federación Empresarial Hotelera de Ibiza y Formentera (Fehif), Roberto Hortensius, como de «peligrosas». «Todavía no he hablado con los compañeros que han participado en la reunión y no conozco en profundidad las reivindicaciones pero, al respecto de las peticiones de aumento en torno al siete por ciento, considero que son desmesuradas, incluso hasta peligrosas», afirmó el representante de la patronal.
«Esta temporada hay una gran incertidumbre en los principales mercados emisores y no parece el mejor momento para ese tipo de demandas. Si se llegaran a plasmar en un acuerdo, el aumento salarial podría poner en peligro muchos puestos de trabajo», añadía el hotelero, quién concluía: «En los contratos firmados con los operadores ya resulta difícil llegar al IPC, si encima pasara esto con los salarios, muchas empresas verían peligrar sus ya estrechos márgenes de beneficio».
Los sindicatos también plantearon una reducción de la jornada laboral a 35 horas semanales, un punto que el representante de la Fehif estima difícil de aplicar en el sector. En cambio, sí que existe «margen para negociar» en el punto en el que UGT y CCOO reclaman una mayor estabilidad en el empleo asegurando que, al menos, el 80 por ciento del empleo corresponda a trabajadores fijos o fijos discontinuos. «Entra dentro de lo razonable», aseguró.
Por otro lado, en la reunión de ayer de Palma, se ha acordado la actualización de la subida de los sueldos este año al IPC registrado, que fue del 4,5 por ciento y no del 2,5 por ciento previsto, según explicó el secretario de Acción Sindical de Hostelería de CCOO Balears, Ginés Díaz.
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