BÀRBARA MUNAR

La huelga de médicos provocó ayer la anulación de 840 consultas en Atención Primaria y seis intervenciones quirúrgicas en el hospital Can Misses. Durante la mañana se realizaron veinte operaciones, dos eran graves y, según fuentes del hospital, «no se podían retrasar».

Según datos facilitados ayer por el Ib-Salut, la huelga fue secundada en el hospital por un 23'2 por ciento de facultativos. Si se compara esta cifra con la primera jornada de huelga del pasado tres de marzo, se comprueba que es cinco puntos inferior, entonces el seguimiento fue del 28'2 por ciento.

En los centros de Atención Primaria el seguimiento de las paralizaciones fue del 38'3%, mientras que el primer día de huelga del anterior paro fue del 45 por ciento.

Según el Ib-Salut, ayer se atendieron a 480 pacientes de los 798 que había citados. Este dato significa que el 60'15 por ciento de las citas se pudieron resolver, mientras que 318 pacientes, casi el 40%, tuvieron que coger cita para otro día.

Datos muy dispares

Como es habitual, las cifras ofrecidas ayer por el Ib-Salut no coincidieron con las del Sindicato de Médico Libre de Balears. Desde el sindicato convocante aseguraron que el seguimiento en Atención Primaria fuede aproximadamente del 90%, mientras que en el hospital secundaron la huelga el 80 por ciento de los médicos.

Asimismo, el sindicato denunció unos servicios mínimos desmesurados que según su portavoz, Ignacio Fernández, fueron «mucho más abusivos que en la anterior convocatoria». Según Fernández, en la pasada movilización, «en Atención Primaria se establecieron como servicios mínimos, por la mañana, tres médicos y hoy (por ayer) cinco, mientras que por la tarde han fijado tres facultativos, el doble que la otra vez».

El mismo sindicato denunció en un comunicado que «la empresa ha impuesto unos servicios mínimos abusivos, entre otras razones, para evitar la presencia masiva de huelguistas en la concentración y minimizar nuestra protesta».

Desde el Ib-Salut no pudieron hacer una valoración de cuáles pueden ser las consecuencias de estas movilizaciones, pero destacaron que «lo que en principio creíamos que se podía reprogramar en dos semanas, hemos tardado un mes, de modo que no sabemos cuánto tardaremos en recolocar todas las citas, si la huelga continúa».

El director Médico de Can Misses, Antoni Cuñat, afirmó que «hemos hecho un esfuerzo considerable para volver a citar a estos pacientes y lo deseable es que se abra un clima de diálogo y se acepten las condiciones que pienso que son generosas. A parte de los diecisiete puntos que presentó el Govern, ha habido más vías de diálogo. Lo deseable es que la huelga termine cuanto antes porque afecta a todos», concluyó.

La primera jornada de huelga de médicos de la sanidad pública balear tuvo menor seguimiento que los paros realizados en el mes de marzo, según la organización sindical a causa de los «excesivos» servicios mínimos marcados por el Ib-Salut.

El director general del Ib-Salut, Josep Pomar, cifró en un 22'6 por ciento el seguimiento de la primera jornada de huelga, mientras que el secretario general del Sindicato Médico, Isidro Torres, dijo que el seguimiento fue ayer de un 80 por ciento. «Sólo 498 médicos están secundando los paros y será a éstos a quienes se les descuente la jornada de la nómina» especificó ayer Josep Pomar.

El director general del Ib-Salut explicó que no está previsto retomar el contacto con el Sindicato Médico mientras haya huelga y reconoció que los servicios mínimos se han incrementado un diez por ciento con respecto al mes de marzo, porque «la huelga es mucho más larga. Creo que discutir sobre los servicios mínimos en un tema tan importante como es la salud no es de recibo», puntualizó el director general del IB-Salut».