El conseller balear de Sanitat i Consum, Vicenç Thomàs, reiteró ayer su disposición a negociar con el Sindicatos Médico para alcanzar un acuerdo que permita evitar la huelga convocada por los facultativos para la semana próxima, al tiempo que subrayó que el Ejecutivo Autonómico está dispuesto a «negociar y hablar desde el espíritu constructivo» para lograr un acuerdo. En la sesión parlamentaria de ayer, Thomàs recordó que la Conselleria se ha comprometido para poner sobre la mesa de negociación un paquete de mejoras laborales y salariales por valor de siete millones de euros, en el que se recoge una oferta pública de ocupación, que permitiría mejorar la estabilidad de 400 facultativos, el nuevo plan para los Médicos Internos Residentes (MIR), y la rebaja de tarjetas sanitarias por médico de familia. Entre los compromisos ya anunciados con anterioridad su departamento destacó también el de que las mejoras retributivas puedan ser superiores en función de la productividad. «Un aumento salarial puro y duro no garantiza ni incentiva la permanencia de los profesionales en las islas», destacó. Entre las propuestas ya plantedas se encuentra la de que los interesados en cubrir vacantes en las Pitiüses y Menorca puedan acceder a ayudas para su traslado familiar e instalación, siempre con el compromiso de permanencia. También recalcó el hecho de que se favorecerá un programa de rotaciones docentes retribuidas para paliar la demanda formativa de los profesionales.

La presidenta del PP balear, Rosa Estaràs, da por «suspendidas» las negociaciones del Pacto por la Salud para el que el presidente rectifique, consensúe los temas relativos a sanidad si realmente quiere un pacto, no decida unilateralmente y muestre capacidad y voluntad de diálogo llegando a acuerdos». La ruptura se debe, sobre todo, al conflicto por el cierre de quirófanos en el Hospital General de Mallorca.