José Pedridón, Antonio Copete, José García y Fernándo Fernández Estévez, ayer, en la sede ibicenca de UGT. Foto: GERMÁN G.LAMA

La Unión General de Trabajadores (UGT) está dispuesta a llegar hasta «las últimas consecuencias» para lograr un aumento del 7% en los salarios de los empleados del sector de la hostelería, que es principal objetivo que plantearán a la patronal en la negociación del convenio colectivo, a partir del próximo martes, en Palma.

La nueva plataforma para el convenio fue anunciada ayer en la sede local del sindicato por Antonio Copete, secretario general de la Federación de Hostelería, Comercio y Juego de UGT Baleares; José García, secretario de acción sindical de la misma federación, y por los representantes ibicencos Fernando Fernández Estevez y José Pedridón. Es una plataforma que este año no será presentada de forma conjunta ante la patronal por esta organización y por Comisiones Obreras (CC OO), una decisión que García calificó de «desgracia» debido a que «cualquier mejora que se consiga va en beneficio de todas y todos los trabajadores». «El afán de protagonismo de algún dirigente del otro sindicato lo ha impedido», agregó.

Según García, esta petición de aumento salarial, que podría afectar a 30.000 empleados entre fijos y temporales de las Pitiüses, se debe a la «crisis que viven las familias de los trabajadores del sector», una crisis, destacó, «que aquí está más acentuada puesto que se trata de una economía estacional que cada vez sufre más el recortes en cuanto al tiempo de trabajo». «El Instituto Nacional de Estadísticas dice que ha subido la vida un 4,5% y todos los que vamos a comprar sabemos la cesta de la compra ha subido un 25 o 30%, sin olvidar las hipotecas», señaló.

Por su parte, Copete explicó que el convenio tendrá una vigencia de dos años y que la propuesta de la subida salarial es «el IPC del año anterior más dos puntos» y también cláusulas de revisión salarial con efecto retroactivo, porque, indicó, «las que tenemos ahora son sólo de actualización».

En lo que se refiere a la negociación, desde el sindicato «no descartan movilizaciones» si los empresarios no atienden a sus peticiones, aunque esperan que todo vaya como hace tres años, en la mesa de negociación del actual convenio, donde se llegó a un acuerdo sin conflictos.

Conciliación familiar

Otra de las finalidades del convenio hace referencia a la conciliación de la vida laboral y familiar mediante la creación de una comisión de negociación permanente y la creación de guarderías de 0 a 3 años.

También buscarán crear la figura del delegado de salud laboral y medio ambiente, para que «para que dé un servicio donde sindicalmente no podemos llegar y, de alguna manera, sea un beneficio tanto para empresarios como para trabajadores», concluyó el secretario general.

Aunque no es la primera vez que ocurre, este año las organizaciones sindicales representativas del sector presentarán sus plataformas para el nuevo convenio por separado. «Hay que tener en cuenta que UGT tiene un 60% de representación en la mesa de negociación y el otro sindicato tiene un 40%, pero no han querido llevar una plataforma conjunta», explicó Copete, quien destacó que la idea del sindicato fue intentar una unión por parte de ambas organizaciones. Según García, esto no fue posible «por el afán de protagonismo de algún dirigente del otro sindicato» aunque recordó que, por parte de UGT, «siempre estamos y estaremos a disposición para unificar las plataformas».

Por otro lado, Copete señaló que la última vez que fueron por separado «la inercia de la negociación les llevó a terminar juntos en una negociación final». «Por eso no entendemos el interés del otro sindicato de querer ir con plataformas distintas», concluyó.