El presidente del Govern, Francesc Antich, indicó ayer que desde el Govern están abiertos a revisar licencias otorgadas que se hayan concedido en terrenos que se van a proteger a través de la ley de medidas urgentes como Benirràs o Roca Llisa. «Sé que ha habido un cierto debate entre grupos parlamentarios pero todavía no hay decisiones definitivas; lo que está claro es que hay una voluntad clara de proteger pero estamos abiertos a ver si en situaciones ya consolidadas se puede dar solución», expresó Antich.

En su día los propietarios de Benirràs se quejaron de que se estaban desprotegiendo zonas de Roca Llisa y sin embargo no se había hecho lo mismo en Benirràs porque eran «modestos propietarios» y no «grandes empresarios». Preguntado por este asunto, el presidente del Govern respondió ayer que se tienen «que aclarar todas las posibles dificultades que puedan tener unos y otros». «Se está estudiando, tenemos que intentar hacerlo lo mejor posible y con igualdad de oportunidades para todos, pero con una voluntad de protección clara», añadió el presidente.

El diputado socialista Joan Boned indicó que hay entre siete y diez licencias concedidas en Benirràs que se podrían revisar, entre ellas las que otorgó el Ayuntamiento cuando ya sabía que iba a haber una moratoria en la zona, aunque matizó que sólo se aceptarán aquellas de viviendas unifamiliares y nunca plurifamiliares.

Sin embargo, uno de los abogados de los propietarios de esta zona, Jaume Roig, explicó que hay más de diez licencias concedidas.

El alcalde de Sant Joan, Antoni Marí Marí, Carraca, recordó que todas las licencias dadas en Benirràs responden a viviendas unifamiliares y a parcelas de menos de 2.000 metros cuadrados. El primer edil consideró «muy positivo» y «de justicia» que se reconozcan estas licencias. El alcalde asegura que la polémica por las licencias otorgadas poco antes de la moratoria se debe al interés por «perturbar el buen nombre del Consistorio». Marí afirmó que éstas han sido las únicas licencias solicitadas en suelo urbano en los últimos meses «y su rapidez se debe a la efectividad de los técnicos en su tramitación y a la ausencia de expedientes en trámite».