R. L. El Ministerio de Medio Ambiente aseguró que las cuatro desaladoras de Balears «van por buen camino», manteniendo su grado de ejecución, y que espera que para el año que viene «puedan estar terminadas».

Así lo detalló el subdirector de Infraestructuras y Tecnología del Ministerio de Medio Ambiente, Joaquín del Campo, durante la reciente celebración de la jornada técnica 'Aguas regeneradas, regadío y desarrollo rural' de la Federación Nacional de Comunidades de Regantes de España (Fenacore).

Además, aseguró que la desalinización será un elemento sustancial en la actual y futura política hidrológica de las islas. «En Baleares un campo importante va a ser la desalación. Ha sido, está siendo y lo será», apostilló.

Del Campo se refirió así a las desaladoras de agua de mar de Andratx y Bahía de Alcudia (Mallorca), Ciudadela (Menorca) y Santa Eulària (Eivissa), proyectos suscritos mediante un convenio que fue acordado por la titular del Ministerio, Cristina Narbona, y el anterior Govern balear.

«Las cuatro desaladoras van por buen camino y se mantienen en grado de Ejecución. Creo que para el año que viene estarán terminadas y podremos así incrementar el nivel de agua del archipiélago», detalló el representante del Ministerio.

Además, Del Campo incidió en que la desalación es el «futuro» de la política del agua tanto en las islas como en el resto del territorio nacional, ya que el presente se caracteriza por un «momento difícil» debido a los «cuatro años de sequía» que lleva padeciendo el país.

«Tenemos que aprovechar todos los recursos de los que disponemos, y ahí --en referencia a Baleares-- tenemos un campo importante porque el mar tiene agua infinita y debemos aprovechar ese poder, fundamentalmente en zonas en las que hay más dificultades de conseguir aguas por presas así como por regulación o modernización de regadíos», enfatizó el subdirector de Infraestructuras del Ministerio.