El encanto de la sencillez deslumbró a todos

Faltaban pocos minutos para la llegada de las personas más esperadas de la Navidad, pero los vecinos de Sant Josep, tanto los más pequeños como los adultos, ya se agolpaban en lugares tan céntricos como la plaza de la Iglesia para dar una calurosa y cariñosa bienvenida a los Reyes Magos de Oriente, quienes hicieron alarde de su gran simpatía y amabilidad cuando decidieron bajar de la carroza varias veces para atender y saludar a los vecinos. Finalmente subieron de nuevo a una carroza con tres grandes estrellas para dirigirse a la carpa, donde los más ansiosos esperaban desde hacía varios minutos. Una vez allí, los Reyes recibieron el saludo oficial del alcalde de la localidad, Josep Marí Ribas 'Agustinet', quien les dio las gracias por haber parado en Sant Josep para repartir regalos e ilusión: «En nombre de todo el pueblo les doy las gracias por repartir los regalos a los más pequeños de la localidad, quienes tendrán tiempo para preparse y ser el futuro de nuestra localidad». Poco después tomó la palabra Melchor, quien destacó algunas cualidades de Sant Josep: «Espero que esta noche sea mágica para todos vosotros; nos dijeron que había gente muy buena y hemos venido cargados de regalos, aunque no todo es comprar y malgastar. Lo importante es compartir y querer; la salud y la alegría son los mejores regalos que se pueden tener en esta noche tan especial para todos».