B. ROSELLÓ Eivissa acogió ayer la reunión de las cuatro federaciones hoteleras de Balears para tratar los problemas comunes y realizar propuestas a las administraciones. Entre estas problemáticas, el presidente de los hoteleros de Eivissa, Roberto Hortensius, resaltó la necesidad de realizar «controles duros» para evitar la oferta ilegal de alojamiento que existen en las Islas y que no cumplen con ningún «control de sanidad y de calidad». «Creemos que las autoridades deben hacer cumplir la ley, la misma a la que estamos sometidos nosotros. Se engaña a los clientes porque no se cumplen las expectativas y está haciendo un gran daño a la imagen de las islas además de no reportar ningún ingreso económico a las arcas públicas». Por ello, los representantes de las federaciones reclamaron que las administraciones controlen y vigilen los canales de comercialización, por los que empresas y particulares ofrecen este tipo de alojamiento.

Otra de las problemáticas comunes que presentaron los hoteleros fue las carencias que presenta el transporte terrestre de las Islas, por lo que reclamaron más licencias de taxi anuales y mayores frecuencias de autobuses que conecten los puntos de llegadas, como puerto y aeropuerto, con las zonas turísticas por excelencia «porque no es admisible que un destino de primer orden, como queremos ser, con las colas que se forman». «Coger un taxi entre dos puntos de cualquier isla sale mas caro que el avión y conceptualmente es impensable que sea más económico coger un avión desde Londres a Palma, por ejemplo, que recorrer una distancia de 40 km en coche, porque no tiene ningún sentido. Demandamos soluciones para aumentar la accesibilidad y la conectividad con los aeropuertos», señaló Alfonso Meaurio, representante de la asociación de hoteleros de Mallorca. En el tema de transporte también apuntaron la necesidad de aumentar los destinos aéreos directos ya no sólo con otros puntos nacionales sino también con las principales ciudades europeas para poder alargar la temporada turística.