TORRES BLASCO/JUAN MESTRE El president de la Comunitat Autònoma, Francesc Antich, aprovechó la sesión de apertura del «debate de la Comunitat» para lanzar una prolija relación de propuestas y planes que tiene previsto concretar durante su mandato.

Antich, a quien hasta ahora se había reprochado que no hubiera enviado aún ningún proyecto de ley a la Cámara balear, llegó a enumerar ayer hasta 14 leyes que piensa aprobar o reformar. También anunció seis pactos y hasta tres planes de choque. Entre las propuestas que el president avanzó en la Cámara figura la creación de una Agencia Tributaria propia, pieza básica para dotar a Balears de la suficiencia financiera que precisa para poder concretar sus grandes proyectos.

Antich, a quien los grupos parlamentarios responderán en la sesión de hoy, citó entre las leyes que tiene previsto enviar a la Cámara la de Medidas Urbanísticas Urgentes que (avanzó por primera vez) servirá para impedir el desarrollo urbanístico en los aledaños del futuro hospital de Son Espases.

A este polémico asunto, que ha marcado los primeros meses de su mandato, dedicó el president un apartado de su discurso. Expuso que si habían optado por ese solar para el hospital de referencia fue porque el PP no les había dejado otra opción.

El president, que al inició de su intervención recordó que hacía 120 días que había obtenido la confianza del Parlament, basó el grueso de su intervención en reclamar el apoyo de todos los grupos (incluido el PP, a quien hizo llamadas expresas) y sectores sociales para sacar adelante sus propuestas. Habrá que esperar a la sesión de hoy para conocer la respuesta del principal partido de la oposición pero, de lo que avanzó ayer la portavoz Rosa Estaràs, se desprende que se mostrará muy crítica con el discurso y que le reprochará su «dependencia» de seis partidos. El president, que dejó muy claro desde un primer momento que iba a huir de cualquier ajuste de cuentas con el pasado y que no iba a detenerse nada en «explicar los aspectos derivados de la situación anterior», comenzó intervención anunciando que su Gobierno ha iniciado un «cambio tranquilo» y que el «consenso social» es un objetivo prioritario. El primero de los grandes acuerdos que quiere firmar Antich es el «Pacto de la Competitividad y la Cohesión Social» para, principalmente, fortalecer la economía balear e impulsar la creación de empleo, para lo cual se crearán dos mesas de trabajo: una de economía con especial atención al turismo y otra dirigida a la generación de puestos de trabajo.