J. L. M. El pleno de Sant Joan acordó anoche incrementos para sus tributos que oscilarán entre un tres y un doce por ciento, según el caso. Uno de los impuestos que más subirá será el de bienes inmuebles (IBI), con un 12'5 por ciento. El alcalde de Sant Joan, Antoni Marí, explicó que la subida obedece a un ajustes del valor catastral, que no se había actualizado desde 1992, y que pasará del 0'65% al 0'77%.

Otros tributos que se verán incrementados son el de circulación de vehículos, el de guarderías (6%), el de obras y construcciones (12%) y el de basuras, que registra uno de los aumentos más destacados debido al encarecimiento de los costes que el vertedero cobra a los ayuntamientos por la eliminación de residuos, que ha pasado de 18 a 30 euros por tonelada. En el caso de Sant Joan, la subida se ha repercutido de forma lineal y no pormenorizada, porque «la distribución política, que hacía que pagasen más quienes más residuos generan, ya se hizo en su momento», señaló el alcalde
Antoni Marí remarcó que en la mayoría de los casos se ha intentado repercutir el incremento del IPC y que el resto de aumentos persiguen «mantener el equilibrio presupuestario».

Así, el primer edil considera que las familias verán incrementada su tributación municipal en una media de 20 euros el próximo año.
El pleno también acordó, entre otros asuntos, la cesión gratuita de un solar de 1.000 metros cuadrados a la conselleria de Medio Ambiente. El terreno se ubica en el núcleo urbano de Sant Llorenç, junto a la carretera, y se destinará a la construcción del futuro Centro de Interpretación de es Amunts, una de las iniciativas que el equipo de gobierno anunció meses atrás.