B. R./ M.J. R. El conseller de Politica de Mobilitat i Activitats, Albert Prats, señaló ayer que las expropiaciones del gasoducto serán «temporales» ya que en el caso de que la infraestructura tenga que pasar por alguna propiedad privada, sólo deberá soterrarse la instalación y se repondrán todos aquellos elementos que se vean afectados por la instalación. «Hay que decri que la afección del gasoducto no será tan traumática como lo fueron las expropiaciones de las autovías», señaló Prats en rueda de prensa.

El conseller señaló que aún están pendientes del nuevo trazado del gasoducto pero reiteró que el objetivo de la máxima institución insular es que la infraestructura discurra a un metro de la carretera, por la zona de servidumbre, para que cualquier obra en el mismo asfalto no afecte al conducto y mantener también la seguridad: «Lo ideal habría sido que se hubiese tenido en cuenta esta instalación cuando se hacía la autopista porque ya se conocía su existencia, ahora será una molestia para los ciudadanos». En este sentido, y a pesar de no contar con las competencias correspondientes, Prtas señaló que el ejecutivo insular se implica y asume el proyecto proque «queremos evitar las molestias a los residentes», aunque no descartó que la futura instalación pase por alguna propiedad, especialmente en el tramo que conectará Cala Gració con el trazado de la autovía. «Si el gasoducto se encuentra con una vivienda habra´que mirar qué se hace en cada uno de los casos», apuntó Prats, que está a la espera del nuevo proyecto que debe presentar Endesa Gas.