Los alcaldes de Sant Antoni y Santa Eulària anunciaron ayer que presentarán alegaciones al trazado terrestre del gasoducto presentado por Endesa para que estas conducciones discurran junto a las carreteras y no obliguen a expropiar ni a pasar por zonas boscosas o propiedades privadas.

Según explicó el alcalde de Sant Antoni, José Sala, la modificación de la Ley de Carreteras prevé que las canalizaciones pasen al lado de las vías previa autorización del organismo titular del vial, por lo que el trazado presentado por la empresa estaría incumpliendo la normativa.

El municipio de Sant Antoni es el más perjudicado por este proyecto y en él se prevé afectar un total de 143 fincas, algunas de ellas pertenecientes al ayuntamiento, aunque la gran mayoría son propiedades privadas. En la zona de Puig d'en Valls hay 20 parcelas afectadas y otras siete en Vila. En total hay 170 expropiados.

El alcalde de Santa Eulària, Vicent Marí, indicó que hay que procurar que el trazado «no afecte a los payeses» y hay que «minimizar las molestias». «Las alegaciones que haremos irán por aquí, porque consideramos que si se emplean los laterales de caminos y carreteras no habrá problema», explicó Marí, que añadió que se pondrán al lado de los propietarios para que el impacto sea el mínimo.

El presidente del PP, Josep Juan Cardona, explicó que el tramo terrestre del gasoducto «siempre tiene que discurrir por suelo de dominio público» y así se contempla en la modificación de la Ley de carreteras incluida en la Ley de acompañamiento de 2004, que indica que estas infraestructuras deben pasar por al lado de la vía o por debajo de la calzada.

«No hay ninguna justificación para que haya expropiaciones, este proyecto me sorprende porque no recoge lo que dice la norma», explicó Cardona, quien aclaró que todavía falta la autorización del Govern balear. «Corresponde a la Conselleria comprobar que el trazado se adapta a la norma y yo insisto en que éste no se ajusta», añadió el diputado, que también recordó que el presidente de Enagás se comprometió en su día a que el gasoducto estaría terminado a principios de julio de 2009.

Los ayuntamientos sólo pueden informar el proyecto pero no pueden ejercer ningún control sobre él porque está exento de licencia municipal.