La duquesa de Alba mantiene intacta su vitalidad y también su gusto por las playas pitiusas. Así lo demostró la pasada tarde en una jornada de playa de la que disfrutó en compañía de una amiga. Ataviada con una camisola estampada de color azul, protegida del sol con un divertido gorro de colores y con unas gafas muy modernas, la duquesa se confundió entre los bañistas para descansar en una hamaca, a orillas del mediterráneo, y bajo una sombrilla.

Una relajante forma de continuar con unas vacaciones ibicencas que comenzaron el pasado viernes cuando aterrizó en la isla para cumplir con su cita veraniega de cada mes de agosto.

Instalada en su residencia Sant Antoni, s'Aufabaguera, la duquesa dedicó también una tarde de ocio para saciar el espíritu hippie del que tanto hace gala y que la lleva a interesarse por los mercadillos artesanales de la isla. Esta vez, atraída por la oferta de artesanías al mercadillo de Las Dalias, Cayetana de Alba se dedicó a pasear entre los puestos de los vendedores y a observar con interés los productos de toda clase que allí se venden. Y, aunque se concentró en apreciar las artesanías de este tradicional mercadillo de Sant Carles, no tuvo problemas en fotografiarse con todos aquellos que se lo pedían.

Las vacaciones ibicencas de Cayetana de Alba extenderán hasta los primeros días de septiembre y, si así de activas continúan, es muy probable que muchos turistas y vecinos se encuentren, en algún paseo, con la Grande de España.

L.Aversa