La isla alberga una gran número de prestigiosas discotecas que ofrecen en su zona VIP muchas comodidades y atenciones enfocadas especialmente a la clientela más selecta. En este sentido, una mesa en reservado puede oscilar entre los 3.000 y los 6.000 euros incluyendo, en el mejor de los casos, una botella de alcohol de las mejores marcas. No obstante, lo más demandado suele ser el champán Moët Chandon, toda una exquisitez para los paladares más selectos. Asimismo, algunas discotecas incluyen además de una cuidada atención personalizada, opcionales servicios de masaje en mesa, visuales desfiles o espectáculos a cargo de performances que hacen más amena la velada. El rapero Puff Daddy; la incalificable Paris Hilton o el motorista Fonsi Nieto y su mujer, Ariadne, son algunos de los personajes que frecuentan durante el verano los privé de las discotecas ibicencas. Todo un lujo que, sin embargo, está sólo al alcance de unos pocos. Para aquellos a los que la economía no les permite disfrutar de estos placeres o ni tan siquiera poder comprar alguna consumición en las discotecas, cuyos precios oscilan desde 12 euros una cerveza a 18 una copa con Red bull, la mejor opción es: el botellón. Una costumbre muy arraigada en España, pese a los últimos intentos del Gobierno por erradicarlo, que concentra, a primera hora de la noche, a un gran número de jóvenes en busca del mejor «puntillo» para la larga noche festiva. Irene Luján