La carreteras, las expropiaciones y la destrucción de yacimientos fue ayer una constante en el discurso de los progresistas en el mitin que ofrecieron en Sant Jordi. Entre otras cosas, el candidato al Consell, Xico Tarrés, aseguró que lo peor de las autovías, «que a alguien quizás le gustan, aunque a mí no», ha sido el trato dispensado a los afectados. «Lo primero que haremos será pedir perdón, reunirnos con los expropiados y mirar los expedientes para que nadie sufra diferencias de trato», dijo Tarrés, que recordó que sólo en iluminación el túnel de Sant Rafel costará 60 millones de las antiguas pesetas. «Me preocupa la situación económica en la que nos han dejado, por eso pediré una auditoría para que esté todo claro». El candidato defendió que lo más sagrado de la isla es el territorio, algo que ha atraído turismo durante todos estos años. «Para entrar por un túnel y encerrarse en un hotel pueden ir a cualquier otro sitio; un hotel bonito lo encontrarán en cualquier lugar del mundo, pero una isla como ésta sólo existe aquí», aseguró Tarrés, que recordó que no han sido los «rojos» los que han quitado la tierra a nadie.

Previamente, el número tres de PSOE-ExC a Sant Josep, Josep A. Prats, prometió que harán un concurso de ideas entre artistas para que Ca na Palleva sea recordada. «Aunque nos han quitado la casa no nos han quitado la dignidad ni la memoria», dijo Prats ante un público en el que estaba presente la familia de Ca na Palleva. «No volverá a pasar que entren en casa de alguien sin papeles y que no haya nadie del Ayuntamiento para defender a la gente», añadió. También Albert Prats criticó que algunos se estén haciendo «un campo de golf gratis, con nuestra tierra y nuestra agua».