Un 70% de los comercios de Sant Antoni facturó en octubre menos que en 2005

M.A.
Si en septiembre los resultados ya habían sido bastante malos para el sector comercial de Sant Antoni, en octubre esta tendencia negativa se acentuó todavía más, según los datos de la encuesta de facturación realizada por la asociación de comerciantes del municipio. De este sondeo, realizado a 40 asociados de diversos sectores y calles del pueblo, se desprende que a la gran mayoría de los negocios, un 70 por ciento, octubre le fue peor que el año pasado por las mismas fechas, con un descenso en la facturación de un 20 por ciento de media. A un 22 por ciento de los encuestados le fue igual que en 2005 y sólo a un 8 por ciento le fue mejor, con un incremento de ingresos de un 10 por ciento de media. Estos porcentajes demuestran que «el mes de octubre ha sido nefasto para el sector», aseguró ayer el portavoz de la Asociación de Comerciantes de Sant Antoni, Juan Torres, recordando que hay que tener en cuenta, además, que las cifras se están comparando con 2005, «un año malo» para el turismo. Asimismo, señaló que esta encuesta confirma la tendencia de la temporada de 2006 en el sentido de que «en la facturación de los comercios de Sant Antoni no se reflejan las subidas de ocupación turística». Entre los factores que han influido en esta situación negativa, según Torres, están el bajo poder adquisitivo de los turistas y que «se ha acortado mucho su estancia». El sector volvió a hacer referencia a la mala influencia del «'todo incluido' barato, que atrae a un turista con poco dinero para gastar en la oferta complementaria». Además, criticó que la temporada turística esté enfocada mayoritariamente a «la fiesta continua con la consiguiente pérdida de varios mercados y tipos de turista». Torres también resaltó que la oferta complementaria no puede abrir los seis meses de temporada porque la mayor parte de la planta hotelera de Sant Antoni este año sólo ha abierto cuatro meses (de junio a septiembre). Para el sector «la desestacionalización ha sido un fracaso» porque en pocos años se ha pasado de una temporada de seis a tres meses en la que sólo se han obtenido buenos resultados los últimos 15 días de julio y en agosto. «Junio y septiembre han sido mediocres y la temporada baja (mayo y octubre) prácticamente ya no existe», recalcó.