MAITE ALVITE

La Conselleria d'Educació explicó que, «a pesar de que la decisión de no trasladar a los alumnos del colegio de Sant Rafel se había tomado con anterioridad», había querido también «escuchar a toda la comunidad educativa y a los padres, aunque su opinión no es vinculante». «Se ha querido priorizar la tranquilidad y la seguridad de las instalaciones del centro y también el buen funcionamiento de Sant Rafel, por este motivo, el Govern no se ha planteado mover a los alumnos a otro centro», insistió. Sin embargo, ni directamente, ni a través del comunicado, la Conselleria balear d'Educació se pronunció sobre las medidas que se iban a adoptar para evitar las molestias de las obras del túnel de la autovía de Sant Antoni, decisión que, aseguró, corresponde a la Conselleria balear d'Obres Públiques. Por su parte, desde este departamento se confirmó que el pasado viernes, a instancias de Educació, se acordó en el Consell de Govern que los trabajos se paralizarán durante el horario lectivo, de 09,00 a 14 horas, en el tramo que afecta a la zona del centro educativo.

Fue el miércoles cuando la consellera insular de Vías y Obras, Stella Matutes, propuso la posibilidad del traslado a S'Olivera para evitar las molestias de ruido y polvo de las obras, una propuesta que no fue muy bien acogida por docentes y padres. El jueves la propia Conselleria balear d'Educació se sumó a esta sugerencia proponiendo un traslado provisional desde octubre hasta marzo, opción que se barajaba junto a la de permanecer en el centro interrumpiendo las obras entre las 09,00 y las 14,00 horas. El lunes profesores y padres se reunieron junto con un técnico del Govern para debatir las alternativas. El encuentro finalizó con una votación de los padres en la que ganó por tres votos de diferencia la opción de no trasladarse.

Los docentes del colegio de Sant Rafel manifestaron ayer su satisfacción ante la decisión adoptada por el Govern balear, que conocieron ayer a mediodía a través de la delegada d'Educació pitiusa, Pilar Marí. La directora del colegio de Sant Rafel, Elena Cardona, señaló que «si la Conselleria balear d'Educació nos garantiza que los alumnos están seguros al cien por cien, estamos de acuerdo con esta decisión». Cardona reclamó al Govern que, a través de un documento o con una inspección técnica, corrobore la seguridad para poder tranquilizar a los padres, preocupados por las posibles consecuencias de las obras del túnel de la autovía. La pasada semana los docentes ya pusieron de manifiesto que preferían no tener que moverse hasta el colegio de S'Olivera, lo que hubiera obligado al traslado no sólo de alumnos y profesores, sino de todo el centro, con el mobiliario incluido, para adecuar las instalaciones provisionales. Para la comunidad educativa el cambio de escuela hubiera ido en detrimento de la educación.