C. ALCÀNTARA
Tres nuevos sacerdotes colombianos son algunas de las novedades de la remodelación de la Diócesis de Eivissa que ha emprendido el obispo de Eivissa y Formentera, Vicente Juan Segura, un año después de su ordenamiento. Además, la Diócesis está a la espera de que llegue un sacerdote filipino pero, por problemas de documentación, se ha retrasado su llegada y un italiano que se incorporará a Formentera.

Esta remodelación de la Diócesis, que afecta a diez de las 27 parroquias de Eivissa y Formentera, contempla que Juan Riera, vicario general de la Diócesis, párroco de Santa Cruz, se traslada a Santa Agnès y Sant Rafel. Riera ha sido renovado cinco años más como vicario general. Enrique Torres, hasta ahora párroco de Jesús, y el vicario de Santa Eulària, Juan Miguel Planells, van a Santa Cruz como párrocos «in solidum», es decir, conjuntamente.

A Jesús va a ir uno de los tres colombianos y a Santa Eulària, Vicent Tur Palau, que se ordenó sacerdote el pasado mes de febrero.

Otro de los cambios afectan a la parroquia de Sant Jordi, con el traslado de Francisco Torres Peters a la iglesia del Rosario, cuyo titular, Juan Souza, se traslada a San Pablo. Pedro Miguel López, que estaba como vicario parroquial en Santa Cruz, se traslada a Sant Jordi. Los tres nuevos sacerdotes colombianos se harán cargo de las parroquias de Sant Agustí, Jesús y Sant Antoni. El párroco de Sant Agustí, Miquel Àngel Riera, se va a Roma para estudiar a Teología Dogmática. Otro de los nuevos sacerdotes, de origen italiano, va a Formentera.

El portavoz de la Diócesis de Eivissa y Formentera, el sacerdote José Luis Mollà, explicó que estos cambios de los cargos parroquiales se deben «a una pequeña remodelación que ha querido hacer el obispo después de estar un año aquí. Ha visto como estaba la carga pastoral y ha pensado hacer un reajuste».

Los cambios en la Diócesis se dieron a conocer oficialmente en una misa con motivo de la fiesta de Cristo y Sumo Sacerdote del obispo el pasado jueves en es Cubells.