M.A.
El Centre d'Atenció a les Drogodependències (CAD) del Consell atendió el año pasado a 761 personas (602 hombres y 159 mujeres), lo que supone una bajada del 4,7 por ciento con respecto a 2004. De esta cifra global, 253 fueron primeras visitas, lo que implica también una bajada del 9,96 por ciento con respecto a 2004, según detalla la memoria de 2005 de este servicio. En proporción a la población, el centro de las Pitiüses fue el CAP de Balears que tuvo más volumen de pacientes, según apuntó el conseller insular de Sanidad y Bienestar Social, Vicent Serra.

El grupo de pacientes más numeroso fue el de personas en tratamiento por adicción a la heroína. El CAD atendió en 2005 a 351 personas con una media de edad de 38 años. Esta cifra supone una bajada de un 14,6 por ciento con respecto a 2004, siguiendo con la tónica general a la baja de los últimos años. Los pacientes que se sometieron al programa de mantenimiento con metadona fueron 344, de los que cerca de un centenar son de fuera de las Pitiüses.

Por otro lado, siguiendo la progresión ascendente de 2004, el CAD registró un nuevo aumento, del 5 por ciento, de los casos tratados por abuso y dependencia del alcohol. En total se atendieron a 227 pacientes con una media de edad de 45 años. Lo mismo ocurre con la cocaína, donde el año pasado se registró un incremento todavía más importante, del 14 por ciento. El centro atendió 154 pacientes, con una edad media de 32 años. La responsable del CAD, Marina Lloves, explicó que el importante ascenso del consumo de esta sustancia, que achacó a un concepto equivocado de 'droga no adictiva', está provocando que la dependencia de la cocaína llegue a puntos impensables en la primera mitad de los años noventa.

El CAD sólo atendió a tres pacientes por abuso de drogas de diseño, con una media de edad de 27 años y a 14 pacientes por abuso de cannabis, con una media de edad de 29 años. Los números no son significativos porque la mayor parte de casos son tratados en servicios de urgencia y en unidades de salud mental. Once personas fueron atendidas por juego patológico y sólo una persona fue asistida por dependencia de psicofármacos. La memoria destaca que 65 personas acudieron al CAD como alternativa a ir a la cárcel.