GUILLERMO ROMANÍ
El director general de Comerç del Govern de les Illes Balears, Francesc Tutzó, y el presidente de la PIME de Formentera, Joan Serra i Mayans, resaltaron ayer, tras la reunión mantenida para tratar los problemas básicos con los que se encuentran los empresarios de la isla «la preocupación existente en el sector ante la competencia desleal que realizan los vendedores ambulantes en la temporada turística».

Serra i Mayans también criticó las carencias del transporte de mercancías, «en manos de un monopolio», según dijo, al referirse a la naviera Baleària, que, según él, da un mal servicio y caro por su posición dominante en el mercado, «una situación de monopolio única en todo el estado español». Para Serra i Mayans, Formentera está sufriendo un problema de desestacionalización cada vez más agudizado lo cual implica serios problemas en el sector comercial de la isla, especialmente por lo que se refiere a «la venta ambulante o a la proliferación de establecimientos que operan sin licencia cuando en la isla se ha hecho un importante esfuerzo para ir sumando establecimientos englobados en la excelencia comercial» y, sin embargo, según los dirigentes de la PIME falta control o medidas reguladoras de la venta ambulante de temporada turística que «suponen una clara competencia desleal a los comerciantes que pagan sus impuestos y mantienen abierto durante todo el año».